EN CHILPANCINGO FALSA ALARMA EN SECUNDARIA GENERA MOVIMIENTO DE SEGURIDAD

Abel Miranda Ayala (texto y foto)
La falsa difusión de un ataque armado en la Escuela Secundaria General “Antonio I. Delgado” (ESGAID), generó pánico y momentos de tensión entre estudiantes y padres de familia que acudieron a retirar a sus hijos.
A ciencia cierta nadie sabe cómo inició el tema pero en diversas redes sociales se empezó a difundir que había un ataque armados, otros decía que había una amenaza y por ello se movilizó a personal de la institución y a la policía municipal.
Ante la alerta, padres de familia se movilizaron rápidamente para recoger a sus hijos, mientras que elementos de la Policía Municipal resguardaron el exterior del plantel.
El director de la institución, Joaquín Lugo Millán, informó que la alarma surgió por publicaciones en redes sociales que advertían de un supuesto enfrentamiento o ataque armado, pero no se tenía certeza de si ocurría dentro o fuera del plantel.
Estableció que en las publicaciones se refirió que el supuesto ataque ocurriría a las 12 del día esto movilizó más a los padres de familia que acudieron a recoger a sus hijos para ponerlos a salvo así mismo las autoridades llegaron para establecer un perímetro de seguridad pero al final de cuentas todo fue una falsa alarma y no hubo ningún tipo de agresión a nadie.
Sin embargo, indicó que el caso sería abordado por personal de la Policía Cibernética, quienes revisarían detalladamente la situación a fin de tratar de dar con los presuntos responsables.
A pesar de esto, el pánico entre los padres se hizo presente, quienes al enterarse de la situación, comenzaron a llegar de inmediato a la institución educativa para recoger a sus hijos.
El director informó que aunque el horario de salida oficial se mantendría sin cambios, sin embargo los padres que quisieran llevarse a sus hijos podrían hacerlo.
Cabe señalar que A mediados del año pasado en esta misma secundaria resultaron intoxicados y tuvieron que ser hospitalizados de emergencia luego de haber consumido pastelillos con marihuana que uno de sus compañeros les vendió.
Tras ese incidente a la escuela fue integrada en procesos especiales que tiene la secretaría de educación para la reconstrucción del tejido social y para la prevención del delito.
De ese caso las autoridades nunca informaron si se detuvo al responsable o cómo fue que estas dos jóvenes habían resultado intoxicadas por el consumo del enervante.