Por Abel Miranda Ayala

Un joven que fue expulsado de la preparatoria número Uno de la Universidad Autónoma de Guerrero reveló que dentro de la institución existen un mercado interno de venta de estupefacientes mismo que el director conoce y protege, explicó que fue dado de baja de manera injusta y sólo por ayudar a compañeras que fueron drogadas contra su voluntad.

El joven de 19 años Jair Silva Carrera, acompañado de su madre María del Rosario Carrera ofrecieron una conferencia de prensa en la que el ahora ex estudiante de preparatoria relató que desde hace un mes empezó a tener problemas con un grupo de sus compañeros que sabe que se dedican a la venta de drogas dentro de la institución.

Estableció que tras un altercado con uno de ellos le dijo que acudiría a poner un reporte en la dirección por el mal comportamiento de su compañero, y la respuesta fue una carcajada y la amenaza.
Si vas con el director es más fácil que te expulsen a ti que a mí.

Fue a interponer su queja a la dirección y terminó siendo expulsado bajo falsas acusaciones.
Detalló que la semana pasada una de sus compañeras le pidió apoyo por que su amiga se sentía mal, fue a verla y se encontraba drogada, la sacaron de la escuela y la llevaron a la alameda compraron leche para darle y que se le cortara el efecto, como no reaccionaba positivamente fueron a la dirección a pedir ayuda y tres maestros acudieron a ayudarlos, finalmente la joven fue llevada a la cruz roja y él se quedó a cuidarla.

Aseguró que no es la primera vez que ayuda a una joven con sobredosis de droga en la preparatoria en al menos otras dos ocasiones ha llevado a compañeras a recibir atención en la Cruz Roja, y señaló que en dos casos han detectado que las jóvenes recibieron regaladas bebidas y es cuando tuvieron esa sobredosis porque se trata de jóvenes que no consumen droga.

El joven aseguró que el director Jorge Ángeles Manzo sabe perfectamente lo que ocurre dentro de la institución y para proteger al grupo de quienes venden la droga, a el lo acusó sin pruebas de intento de violación y consumo de drogas y lo expulso de manera definitiva de la institución.

El preparatoriano negó ser drogadicto y se dijo dispuesto a someterse a un examen Antidrogas para comprobar que es inocente, incluso dijo que tiene un padecimiento cardiaco que le impediría consumir drogas como el cristal que es lo que se comercializa dentro de la institución.

Jair Silva adelantó que acudirá a la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Guerrero (CDHEG) para denunciar que lo hayan dado de baja, cuando no hay una razón para esa acción.