Por Baltazar Jiménez Rosales

El presidente municipal de Chilpancingo, Gustavo Alarcón Herrera, lamentó y condenó el artero asesinato del presidente municipal de Uruapan, Michoacán, Carlos Alberto Manzo Rodríguez, perpetrado la tarde-noche del sábado pasado en plenos festejos de Días de Muertos y al mismo tiempo lanzó un reproche a la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo.

En el comunicado que emitió la misma noche del sábado a través de sus redes sociales, el alcalde capitalino expresa que por el clima de inseguridad y violencia que, de igual forma vive Chilpancingo, ha pedido la intervención de la Federación: “lo hemos hecho con respeto, con insistencia y con responsabilidad. Pero la violencia no espera, la inseguridad no da tregua, y los alcaldes no pueden seguir enfrentando solos una guerra que no provocaron.

La tarde-noche del sábado pasado, después de que inició los festejos de Días de Muertos con el acto del encendido de las velas, en pleno centro de la ciudad de Uruapan, Michoacán, al cual fue acompañado por su familia, el alcalde del lugar, Carlos Alberto Manzo Rodríguez fue artera y cobardemente asesinado a balazo. En tales hechos uno de los atacantes murió en el lugar y dos más fueron detenidos, informaron las propias autoridades.
Por la noche, el alcalde de Chilpancingo emitió un comunicado mediante el cual condenó el magnicido: “la noche de este sábado, México volvió a estremecerse con un acto de violencia que hiere profundamente a nuestro país”.

Alarcón Herrera puntualiza en su documento que “el asesinato del presidente municipal de Uruapan, Michoacán, Carlos Manzo, no es sólo un ataque contra una persona, sino contra la democracia, contra la autoridad legítima y contra el derecho del pueblo a vivir en paz”.
Por el artero asesinato, el alcalde de Chilpancingo expresa a la familia del alcalde de Uruapan su más profunda solidaridad, el cual hace extensivo a los habitantes de ese municipio del estado de Michoacán “y con todos los michoacanos que hoy sufren el dolor de una pérdida injusta y brutal”.

El alcalde Alarcón Herrera puntualiza que “este hecho nos duele doblemente, porque Chilpancingo ya vivió el horror de la violencia política, ya sintió lo que es perder a un presidente municipal en funciones, sabemos lo que es enfrentar el silencio, la indiferencia y la falta de respuesta de las instituciones.

En su reproche que hace al gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo, Alarcón Herrera insiste en exigir justicia “para Carlos Manzo, exigimos resultados inmediatos”, pero además se pronuncia por que haya “un cambio de estrategia nacional que proteja la vida de quienes servimos desde el territorio, desde la primera línea de contacto con la gente”.

Este crimen, como el que enlutó a Chilpancingo hace un año, con el asesinato del presidente municipal Alejandro Arcos Catalán, no puede quedar impune ni en el olvido, porque callar sería traicionar a quienes confiaron en nosotros.