Helios Escobedo, colaborador del CIMMYT, comparte consejos clave sobre el uso de extractos de plantas como una alternativa para el manejo de plagas. (Foto: CIMMYT)

En el campo, no todo se trata de eliminar. A veces, solo basta con saber convivir.
Los extractos vegetales son una alternativa agroecológica para manejar plagas sin dañar el ecosistema. En lugar de exterminar insectos, estas soluciones naturales buscan repelerlos, incomodarlos o impedir su desarrollo.

Helios Escobedo-Cruz, fitotecnista y colaborador del CIMMYT con más de 15 años de experiencia en manejo agroecológico, nos comparte estos tips prácticos para comenzar a usarlos de forma efectiva y segura.

¿Por qué usar extractos vegetales?

Un productor sostiene en sus manos plantas recién cortadas que serán utilizadas para la elaboración de extractos vegetales. (Foto: Open AI)

  • Son naturales, económicos y se pueden preparar con materiales locales.
  • No generan residuos tóxicos y dentro de las plantas existen diversos efectos como repelentes, fumigantes, insectistáticas e incluso atrayentes.
  • Fortalecen la salud de los cultivos y ayudan a mantener el equilibrio en la parcela.

¿Qué plantas puedes usar?

Diversas plantas pueden ser utilizadas para la elaboración de extractos para el manejo de plagas. (Foto: Open AI)

  • Chicalote: contiene más de 18 compuestos útiles; también mejora el suelo.
  • Nim: insectistático tradicional con múltiples estudios.
  • Tabaco: la nicotina es eficaz contra varias plagas.
  • Cempasúchil: excelente para controlar nematodos.
  • Ruda, eucalipto, menta: ideales para hacer polvos protectores.
  • Ajo, cebolla, chile, clavo, canela, pimienta: comunes en la cocina, útiles contra plagas en concentraciones elevadas y también contra enfermedades bacterianas y fungosas.

Selecciona la planta según el insecto y el tipo de plaga (follaje, raíz o poscosecha).

¿Cómo se preparan?

Un productor rural vierte un preparado casero a base de plantas locales, utilizando agua como solvente principal. (Foto: Open AI)

  • Cocción: hierve raíces o tallos duros 20-30 minutos.
  • Infusión: usa hojas o flores. Vierte agua hirviendo, deja reposar y enfría.
  • Maceración: tritura partes de la planta y déjalas en agua, alcohol, vinagre o aceite por al menos 72 horas.
  • Purines: fermenta en agua durante 15-20 días, airea a diario.
  • Polvos: seca hojas al sol, tritura y aplica en semillas o almacenamiento.

¿Qué solventes son permitidos agroecológicamente?

Frascos con agua, vinagre, alcohol y aceite vegetal: los cuatro solventes compatibles con prácticas agroecológicas. (Foto: Open AI)

  • Agua
  • Vinagre
  • Alcohol etílico
  • Aceite vegetal

Evita metanol, benceno o éter: no son compatibles con la agroecología ni con la salud del suelo.

¿Cuándo aplicar?

Un productor rural vierte un preparado casero a base de plantas locales, utilizando agua como solvente principal. (Foto: Open AI)

Hazlo muy temprano o al atardecer. Así cuidas a los insectos benéficos que trabajan durante el día (como abejas o parasitoides).

Recomendaciones clave

Un agricultor revisa su parcela mientras planifica la rotación de plantas para evitar resistencia en plagas. (Foto: Open AI)

  • Rota las plantas que usas para evitar que las plagas generen resistencia.
  • Guarda los extractos en lugares frescos, protegidos del sol.
  • Identifica bien la plaga antes de elegir qué planta usar.
  • Aunque sean naturales, aplica con criterio y en dosis adecuadas.
  • Mezcla especies aromáticas e irritantes para mayor efecto.

Las plantas no solo alimentan, también protegen. Con ellas puedes cuidar tu cultivo de forma económica, creativa y responsable.

Si quieres aprender más sobre cómo prepararlas y aplicarlas, acércate al Hub del CIMMYT más cercano. Te acompañamos paso a paso para que tu parcela sea más sana, resiliente y esté en armonía con el ecosistema.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *