Chilpancingo, Guerrero. Mayo 17-2022.- Eran las 18 horas con 3 minutos, Esteban Albarrán Mendoza, Diputado Secretario del Congreso Local, leía a petición de la Diputada Presidenta de la Mesa Directiva, Flor Añorve Ocampo el resultado de la votación de las y los legisladores del tema central para la ciudadanía en esa sesión: el aborto.

A favor 30 votos, en contra 13, una abstención y un voto nulo. La Quincuagésima Tercera Legislatura Local aprobaba por Mayoría la Ley del aborto.

La aprobación se sugería desde la noche anterior cuando circuló el oficio firmado por la Presidenta de la Mesa Directiva, Flor Añorve Ocampo, mediante el cual se convocaba a la sesión para el día martes 17, cuando estaba previsto para el miércoles 18.

El desarrollo de la sesión fue de rutina. Los dos accesos a la sede del Congreso Local estaban bloqueados por dos grupos antagónicos: unos a favor de la vida de los no nacidos, el otro a favor de la despenalización del aborto. Cerca un grupo de elementos de la Policía, por cualquier cosa, decían.

Llegado el punto central, las voces del interior de la sede del Poder Legislativo empezaron a subir de tono. Se pidió silencio. La presión en ambos sentidos se dejaba sentir. Pidieron silencio nuevamente. Se escucharon los Posicionamientos, alternados, a favor, en contra.

No hubo sorpresa. Ni la presión del Obispo de la Diócesis Chilpancingo – Chilapa, José de Jesús González Hernández, que dijo buscarían excomulgar a las y los legisladores que votaran a favor, pesó. Las y los aliados a la posición de la no despenalización, se mantuvieron.

Era claro quien de las Mujeres Legisladoras estaba a favor de la Interrupción Legal del Embarazo, un distintivo en color verde lo hacía evidente.

Afuera del recinto las voces subían de tono. Pero nadie invadió el espacio intermedio para evitar una confrontación.

El mediador de la Iglesia se movía de un lado a otro, consultaba su celular, intentaba sonreír, pero su tensión era evidente. Del otro lado había confianza. Una manta preparada lo decía todo al terminar de cantarse el resultado cuando fue desplegada.

“Lo logramos, es Ley” se leía entre los saltos de gusto de un grupo de feministas, justo cuando la Diputada Flor Añorve Ocampo suscribia lo conducente.

El cambio de tema al interior del recinto fue frío. Se abordaba ahora el tema de caminos. Las y los legisladores estaban en sus asientos. Cada cual, con su voto secreto, pero evidente.

Las voces que pedían la vida guardaron silencio, no se acercaron al segundo acceso. Anunciaron que darían su opinión en una conferencia de prensa, sin determinar día, ni lugar, ni hora.

Una ola verde coreaba que Guerrero se convertía en la octava entidad en contar con una Ley de esa naturaleza, después de un camino no tan fácil.