Por Isabel Ortega Morales/ CEPROVYSA.COM/ SURIANA RADIO
Tlapa de Comonfort, Guerrero., Junio 20-2023.- En un gesto simbólico de solidaridad y oración, a las tres de la tarde, los centros religiosos católicos de México hicieron sonar sus campanas para recordar a los sacerdotes jesuitas Joaquín Mora Salazar y Javier Campos Morales, así como al guía de turistas Pedro Palma, quienes fueron asesinados hace un año en Cerocahui, Chihuahua. Esta iniciativa, convocada por la Conferencia del Episcopado Mexicano, busca honrar la memoria de las víctimas de la violencia en el país y fomentar la búsqueda de la paz.
En el estado de Guerrero, las catedrales de las diócesis de Chilpancingo-Chilapa, Tlapa de Comonfort, Acapulco y Ciudad Altamirano también se unieron al acto, replicando el repique de campanas durante un minuto. Este gesto se suma a los esfuerzos de la iglesia y de la sociedad en general para generar conciencia sobre la importancia de trabajar juntos en la construcción de un mundo más pacífico.
El repicar de campanas es un llamado a todas las iglesias, a la sociedad en su conjunto y a las autoridades civiles para unir esfuerzos en busca de la paz. El simbolismo de realizar este acto a las tres de la tarde, el momento en que Jesús murió según la tradición, refuerza la invitación a superar los conflictos y trabajar en conjunto para resolver los desafíos que enfrenta la sociedad. La participación de todos, desde los hogares y la educación de los niños, es fundamental para construir una conciencia clara sobre el valor de la vida.
Este llamado a la reflexión y la oración por las miles de personas que han perdido la vida o se encuentran desaparecidas debido a la violencia, así como por sus familiares, busca generar conciencia y promover acciones concretas que contribuyan a la construcción de una sociedad más pacífica y justa. La iglesia católica reafirma su compromiso de ser un agente de transformación y esperanza en medio de los desafíos que enfrenta México.