Chimalpopoca, sustituyó a Huitziluhuiti, fue el último tlatoani azteca que mantuvo una relación de subordinación con los tepanecas de Azcapotzalco.

Su glifo está formado por un escudo, usualmente adornado con bolas de plumas preciosas y volutas de humo. Nacido entre 1405 y 1408, fue hijo de Huitzilíhuitl, su antecesor en el trono, y de Miahuehxochtzin, princesa de Azcapotzalco.

Chimalpopoca tuvo varias mujeres e hijos pero la línea de la sucesión recayó en los descendientes de su hermano, Moctezuma Ilhuicamina.

Gracias a que era nieto de Tezozómoc, el poderoso obtuvo ventajas que le permitieron iniciar su pleno crecimiento en Tenochtitlan.

No obstante su violenta muerte, al final del reinado de Chimalpopoca la capital azteca estaba en capacidad de enfrentarse al otrora cuasi invencible imperio tepaneca.

Su corta edad al momento de ser nombrado tlatoani, entre 9 y 12 años, casi un niño, permiten suponer que en su nombramiento más que los méritos políticos o militares, como sería el caso de la mayoría de los otros tlatoanis, se tomaron en cuenta factores de conveniencia política, y su ascendencia por vía materna al linaje tepaneca.

El que Tezozómoc, señor de Azcapotzalco, tenía preferencias por su nieto se vio reflejado en la constante reducción del tributo que los mexicas debían entregarle. Lo anterior permitió que las condiciones de vida en Tenochtitlan siguieran mejorando, se realizaran cada vez más construcciones y se lograra una mayor cantidad y variedad de bienes.

Durante ese tiempo los aztecas solicitaron a Tezozómoc su permiso para construir un acueducto desde Chapultépec.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *