Al pueblo de México
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   A los medios de comunicación locales, nacionales e internacionales 
   A los tres niveles de gobierno

¡Levanta la voz, y hazles justicia!
¡Defiende a los pobres y necesitados!
Proverbios 31:9

El Centro de Derechos de las victimas de violencia Minerva Bello, busca siempre que se garantice los derechos humanos de las personas, mediante la activación de mecanismos jurídicos y políticos, como canales primordiales para el debido respeto de los derechos humanos y exigir que el Estado garantice de manera efectiva el cumplimiento de los tratados internacionales y de los derechos previstos en la norma constitucional. Como hemos mencionado anteriormente, nos preocupa la militarización de las instituciones encargadas de la procuración de seguridad y justicia. Aun así y ante los cambios y nombramientos en los órganos de procuración de justicia somos respetuosos de ello, esperando que los cambios se acompañen con la sensibilidad, progresividad y respeto de los derechos humanos.   

Por ello, ante el nombramiento realizado al Maestro Zipacná Jesús Torres Ojeda, como titular de la Fiscalía General del Estado, quienes conformamos este Centro de Derechos Humanos, le exhortamos para que se conduzca con sensibilidad y perspectiva de derechos humanos de acuerdo al contexto de cada caso, bajo los principios de eficacia, honradez, imparcialidad, objetividad, profesionalismo.

Que su gestión frente a la institución investigadora, procure la transparencia para con las víctimas en su proceso de investigación.

Que las funciones de investigar y perseguir el delito se acompañen con estrategias integrales, con personal especializados en materia, técnica, legal y científica, con la finalidad de que las victimas accedan a la verdad y a la justicia, garantizando el respeto a los derechos humanos y a la debida reparación integral del daño de víctimas y ofendidos. 

Como centro de derechos humanos nos mantendremos firmes en nuestra demanda de procuración de justicia efectiva. El Maestro Zipacná Jesús Torres Ojeda tiene una gran responsabilidad, al asumir el compromiso de esta alta encomienda y de rendir cuentas claras en los procesos de investigación que dejó su antecesora.

Por último, reafirmamos nuestro compromiso con la agenda de derechos humanos, para continuar alzando la voz, monitoreando de cerca los procesos de investigación de las víctimas y familiares, exigiendo el cumplimiento de los estándares más altos en materia de derechos humanos. 

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