Noe Espinoza
ALCOZAUCA, Guerrero, 24 de mayo de 2025 – Como en tiempos de la Conquista de México, donde los españoles impusieron la iglesia católica mediante asesinatos y violencia para legitimar su dominio, hoy en Petlacalancingo, Municipio de Alcozauca, cuatro familias cristianas están siendo víctimas de una agresión similar.
Desde hace varios años, estas familias han sido obligados a brindar servicios a la iglesia católica bajo amenaza por los mismos Pobladores, sin embargo solo han contribuido en obras de beneficios sociales y para doblegarlos de manera cruel y despiadada les han retirado los servicios básicos de energía eléctrica, drenaje y agua potable.
Este acto representa una grave violación a sus derechos humanos y ha encendido las alarmas en la región. Desde esa Comunidad Indígena NaSavi las familias afectadas hacen un enérgico llamado a los TRES NIVELES DE GOBIERNO y a TLACHINOLLAN centro de derechos humanos de la montaña, para que se detenga esta injusticia, y garantizar La libertad de culto, o libertad religiosa, que es un derecho fundamental que garantiza a cada persona la posibilidad de elegir libremente su religión o creencias.
El Presidente Municipal, Crispin Agustin Mendoza, que encabeza el Gobierno Municipal de Alcozauca de Guerrero 2024-2027 ha solicitado la intervención inmediata de los gobiernos estatal y federal, declarando públicamente que “esto no es justo en pleno siglo XXI ya que a la comunidad ha entregado diversos apoyos: al comisario una cantidad de 30 mil pesos en efectivo para la celebración del día de las madres, hace algunos días una camioneta nueva con valor de más de medio millón de pesos y obras Sociales para toda la comunidad están programados, pero no es justo que dejen sin servicios a las familias que no creen en lo mismo o piensen diferente”.
El artículo 24 de la Constitución: Establece que “Todo hombre es libre para profesar la creencia religiosa que más le agrade y para practicar las ceremonias, devociones o actos del culto respectivo, siempre que no constituyan un delito o falta penados por la ley”.
La situación en Petlacalancingo refleja una preocupante repetición de imposiciones violentas bajo un contexto de intolerancia religiosa, poniendo en riesgo la convivencia y los derechos fundamentales de sus habitantes, de esta afectación inhumana contra las familias cristianas no existe ningún procedimiento legal, sin embargo clamajan Justicia a Dios y a nuestras autoridades.
