Por Abel Miranda Ayala
Dieciséis trabajadores que forman parte de la dirigencia del Sindicato Autónomo y Democrático de Trabajadores del Ayuntamiento de Chilpancingo (SADTACH) fueron despedidos por el gobierno encabezado por el alcalde de Chilpancingo, Gustavo Alarcón Herrera, luego de mantener tomado el Palacio Municipal durante nueve días.
De acuerdo con el alcalde Alarcón Herrera, previo al despido, al líder de la organización sindical se le notificó que su movimiento era ilegal, pues, asegura, no cumple con las formalidades que establece la ley laboral para que un paro de labores sea legal.
Dijo que los trabajadores fueron notificados de manera formal que debían regresar a sus labores, sin embargo, no lo hicieron por lo que se inició con los procedimientos de despido de 16 personas.
El pasado viernes aproximadamente a las siete de la noche, el dirigente sindical, Isidro Bautista Delgado, anunció que después de llegar a acuerdos con representantes del gobierno estatal retirarían el bloqueo que mantuvieron por nueve días.
Señaló que entre los compromisos establecidos se encuentran: el pago del bono del Día del Servidor Público, la garantía de salarios para los empleados; además, dijo, se comprometieron a velar para que no existan despidos ni represalias en contra de los paristas.
Sin embargo el alcalde indicó que esos acuerdos son cosa diferente al proceso legal que se inició por las afectaciones que se cometieron en agravio de la población de Chilpancingo; indicó que además del proceso administrativo que derivó en los 16 despidos, también se iniciaron demandas penales por la toma de la calle.
Al Sindicato Autónomo y Democrático de Trabajadores del Ayuntamiento de Chilpancingo se le ha relacionado con la exalcaldesa Norma Otilia Hernández, quien incluso les entregó una oficina dentro del palacio municipal, misma de la que fueron desalojados por el actual gobierno, lo que derivó en la toma del palacio municipal y el bloqueo a una de las principales avenidas del centro de la capital.