Por Baltazar Jiménez Rosales

El problema del consumo de drogas ya es un problema que se registra en escuelas de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro), reconocieron ayer primeramente el director de la Escuela Preparatoria Número 1, Jorge Ángeles Manzo, y posteriormente el rector Javier Saldaña Almazán.
En este sentido, incluso el rector Javier Saldaña Almazán, reconoció que el consumo de drogas se registra principalmente en escuelas de las principales ciudades del estado, es decir, Chilpancingo y Acapulco y aunque no quiso dar detalles al respecto, sí aceptó que este es un problema que “en los últimos años se ha acrecentado demasiado”.

Expulsión de un alumno de la Prepa 1

La mañana de ayer, el estudiante de segundo grado de la Escuela Preparatoria Número 1 de la UAGro, Jesús Jair Silva Carrera, denunció que de manera injustificada fue expulsado del plantel, con lo que fue violado su derecho a la educación, en una conferencia de prensa que dio acompañado de su señora madre, Rosario Carrera Aguirre, en la cual acusó al director del plantel, Jorge Ángeles Manzo, de haber tomado una decisión en su contra, sin pruebas.
Silva Carrera dijo ser acusado de intento de violación y consumo de drogas en el plantel, por lo que dijo estar “dispuesto a ser sometido a pruebas para corroborar que lo que dicen es mentira”.
Reveló que en la Preparatoria número 1 un grupo de jóvenes se dedica a la venta de drogas entre sus compañeros, principalmente de “la llamada cristal y mariguana”, aunque acusó que los directivos “no hacen nada para evitarlo”, pese a estar enterados.
Denunció que desde hace un mes ha sido objeto de agresiones físicas por un grupo de estudiantes (tres hombres y una mujer), y pese a presentar el caso ante la dirección del plantel, no tuvo una respuesta favorable, sino al contrario, concluyó con su expulsión.

La versión del director

Por su parte, el director de la escuela preparatoria número 1, Jorge Ángeles Manzo, aclaró que el alumno Jesús Jair Silva fue expulsado, pero no por violación sino por un hecho de violencia contra uno de sus compañeros, pero que además su caso ya había sido turnado a la Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Guerrero.
Precisó que la expulsión de este alumno fue el resultado de una reunión con los padres de familia, luego de que el estudiante, junto con otros compañeros, participó en un hecho de agresión física en el exterior del plantel. “Hay un video sobre el caso; hay otros dos alumnos más suspendidos”.
El director de la Prepa 1 no quiso profundizar más en el tema, bajo el argumento de que es un tema complejo… es un conflicto grave”, ya que se trata de un asunto “de drogas”, principalmente consumo por parte de los estudiantes.
—¿A qué se refiere con que es complejo?, se le cuestionó.
—Cuando estamos hablando de drogas, es un tema muy complejo para nosotros, para los padres de familia, que intervenga la Fiscalía…
Señaló que con el fin de prevenir el consumo de drogas en la escuela, la Dirección de la Preparatoria Número 1 tiene convenio de colaboración con el Centro de Integración Juvenil (CIJ) desde el 2006, “siempre se ha dado este tipo de situación, pero lo que nos ha pedido el rector es que apoyemos a los muchachos”.
Asimismo dijo no tener conocimiento que al interior de la Escuela Preparatoria Número 1 haya venta de drogas, aunque consumo sí: “pues son chamacos, yo creo que eso sí se da y lo hemos estado platicando con padres.

Es en escuelas de Chilpancingo y Acapulco

Por su parte, el rector Javier Saldaña Almazán, señaló que en la UAGro hace 20 años no había consumo de enervantes, problema que sólo se daba en las ciudades grandes, pero “hoy en estos últimos años se ha acrecentado demasiado”, aunque no quiso precisar en que escuelas se da principalmente: “no te puedo decir, se informa a las autoridades y han acudido”.
Precisó que cuando se detecta algún caso de consumo de drogas en alguna escuela, se hace “lo correspondiente…hay protocolos: si detectas algún joven que está consumiendo, lo llevas a la Dirección con el Departamento Psicopedagógico, se le arma un protocolo y se avisa al área del gobierno correspondiente y se le da seguimiento, porque un joven que consume no es un delincuente, es un joven que necesita ayuda”.
Saldaña Almazán comentó que en una ocasión “un director le quitó su droga a un chavo que andaba vendiendo y en la noche le cayeron a su casa, por lo que el director tuvo que dejar la escuela y la ciudad. Insistió, por esta situación, que se deben tener protocolos de mucha seguridad.
Aclaró que el consumo de drogas en las escuelas de la UAGro es mínimo y sólo se da en las escuelas grandes, que son Chilpancingo y Acapulco.

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