¡Llegaron! Al primer encuentro de “Periodistas ante la Adversidad” a demandar ¡Respeto! Al gremio.
Sus rostros y trayectorias profesionales, conocidas por ¡Todos!
Cada uno, en aquel salón “Ícaro” de la alcaldía Miguel Hidalgo en la capital del país, expresó con ¡Libertad! Sabíamos la prioridad: Evitar que la tinta de sus plumas, se convierta en ¡Sangre!
Un ejercicio periodístico ¡Seguro! Y en mejores condiciones.
Fue un gremio unido.
De fortaleza y decisión.
A ¡Nadie! Se impidió hablar ni se impuso tema.
El micrófono se compartió para todos y entre todos.
Otra coincidencia ¡Frenar! Embates y aglutinar al gremio, organizado o independiente, sin perder cada uno su figura como organización.
Se expusieron casos personales de persecución, abuso y acciones conjuntas de protección a los derechos laborales y de expresión
La exigencia continua, ¡protección efectiva a la vida!
Respeto al ejercicio laboral del periodismo, sin ¡División! Ni etiquetas o mentirosas acusaciones.
En grupo se definió la exigencia:
Los tres poderes -Ejecutivo, Legislativo y Judicial-, las empresas periodísticas y las áreas de comunicación social, deben garantizar, sin amenazas ni ¡Muerte! La libertad de expresión.
¡Unidos! Periodistas independientes y de agrupaciones, definieron el rumbo futuro para una segunda reunión.
Se evidenció también, el uso mediático, y con sesgo, del mecanismo de protección a periodistas en la Ciudad de México.
Se exigió transparencia en el uso del presupuesto, y acciones más preventivas, que reactiva, de ese instrumento para evitar el asesinato de comunicadores.
En esa reunión fraternal, se impulsó la ¡Alianza! Del gremio.
También se ofreció lazos de apoyo para quienes estuvieron en el encuentro de periodistas, en San Cristobal de las Casas, Chiapas.
Y a la lucha que se emprende de los trabajadores de Notimex.
Fue una reunión de más de diez horas que fusionó las plumas y las voces de cada uno para plasmar, ¡Unión! Y ¡Fortaleza! Gremial, sin liderazgos individuales.