Por Edmundo Cázarez C
-Tercera y última parte-

“Cuando los empresarios y dueños de los medios de comunicación quieren dirigirlos, aunque son los dueños, no es sano que lo hagan, pero cuando esto sucede y se aferran en imponer visiones empresariales sobre visiones periodísticas, resulta una terrible idea. Zapatero a tus zapatos”, expresó el periodista Guillermo Ortega Ruiz, en esta tercera y última parte de la entrevista que concedió a ÍNDICE POLÍTICO. Asimismo, al cuestionarle acerca de que, si Televisa afronta tiempos de crisis, dijo: “Televisa ya no es lo que fue. Son nuevos tiempos y los nuevos tiempos, siempre traen nuevos desafíos. No he visto que los nuevos directivos hayan sabido entenderlos, ni tampoco he observado que hayan sabido sortear los grandes desafíos. Las compañías tienen sus épocas de pujanza y etapas de crisis, tanto en la penetración hacia el público y en el éxito de sus programas”

Al preguntarle su opinión acerca de la constante denostación y ataques que son objeto periodistas y diversas personas desde la máxima tribuna del país, a través de las mañaneras, enfático, manifestó que es una irresponsabilidad que no corresponde al jefe del Ejecutivo Federal “López Obrador es un presidente que debería gobernar para todos los mexicanos y no para un puñado de ellos. Debería ser un presidente que tendría que gobernar acompañado de las fuerzas políticas, que siempre tienen algo importante y valioso que aportar, pero no confrontándolas todos los días desde las mañaneras”

Por último, al interrogarle si en México puede darse un Watergate en Palacio Nacional, categórico, sostuvo: “No veo cómo, cuando hay un Fiscal a modo. No veo cómo, cuando tienen una mayoría simple en el Congreso de la Unión y mayoría a modo. Se ponen de tapete al presidente. Tampoco veo cómo, cuando tenemos un presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación que genera cuestionamientos porque no se pronuncia claramente, respecto a temas como alargarle el periodo y cuando es ambiguo en determinada decisión, lo que hace suponer, que es un ministro de la Corte a modo”

Entrevistado en el interior de un moderno departamento, al poniente de la Ciudad de México. Sencillo y amable en su trato. Educado, haciendo gala de un buen sentido del humor. Sincero y directo en sus respuestas, me dijo:
-¿Cómo se hacia el periodismo televisivo de los años 70´s, a diferencia del México actual?
-¡Qué pregunta tan interesante!!… ¿Cómo se hacía el periodismo de los años 70`s?… Uff, Edmundo, acabas de tocar un punto muy importante. El periodismo que se realizaba en los años setentas, justo cuando me inicié, era con mucho amor y con absoluta dedicación. Con un espíritu de investigación y creatividad. Con una inquebrantable lealtad y disciplina, pero también, totalmente artesanal y profundamente dirigido a fortalecer la unión de la sociedad y no como sucede ahora, enfocado a la denostación y al enfrentamiento. A un muy lamentable distanciamiento, no solamente entre los propios comunicadores sino en la sociedad, y lo que es peor, emprendida desde la más alta tribuna de Palacio Nacional, a través de las mañaneras.
-¿Qué enseñanzas aprendiste de Jacobo Zabludovsky?
-Jacobo fue un gran Maestro, era en sí, un artesano de la noticia. Durante horas enteras, se dedicaba a editar personalmente, una por una, las notas y reportajes que se transmitirían en su noticiero. Contaba con un espléndido ayudante, Toño Bustamante -su editor de cabecera- Toño, llegaba hasta la oficina de Jacobo cargando un enorme carrete con todas las películas de las entrevistas y reportajes. Así, era como se hacía el periodismo televisivo de los años setentas y se convirtió para mí, en una sagrada rutina. Presenciar y colaborar en la integración de su noticiero ¡Lo armaba pieza por pieza, como si fuera un rompecabezas!!
-¿Cuál fue tu primera comisión periodística fuera del país?
-Un día, Jacobo me dice: “El licenciado Miguel Alemán Valdés, el expresidente de la República, viajará a Houston ¿Por qué no te vas a cubrirlo? La cosa estará tranquilona, participará en un festival charro y estará acompañado de varias artistas del cine nacional como Irán Eory. Vete con él, cosa que te distraes un poco del stress que viviste con los recientes reportajes de escándalos políticos”
-Acabas de ingresar y te mandaba a una misión fuera del país…
-Me señalaba: “Quiero que te vayas a refrescar la mente porque el ambiente, aquí, está muy contaminado para ti. Necesito que viajes esos tres días con el licenciado Alemán y regreses con otra mentalidad”
-¿Qué sentiste en tu primera comisión y junto a un expresidente?
-Fue un viaje muy interesante para mí. Entrevistar al expresidente Miguel Alemán, era todo un personaje. Era director general del Consejo Nacional de Turismo. Jacobo me estaba brindando la oportunidad de saltar al mismo nivel de los demás reporteros, sin lugar a dudas, era mi gran entrada a 24 HORAS.
-¿Y luego?
-Joaquín López Dóriga dejó Televisa y se fue a Canal 13, que luego se transformó en Imevisión y luego se convirtió en TVAzteca- Cuando Jacobo se ausentaba del noticiero, me dejaba de suplente junto con Lolita Ayala.
-Sobre tus hombros, había caído una enorme responsabilidad…
-Por supuesto que sí…
-¿Te daban miedo las cámaras?
-Sí, la verdad es que sí. Las cámaras siempre imponen, pero impone más, lo que hay detrás de esas cámaras ¡Una enorme audiencia!!, La delicada responsabilidad que adquieres como comunicador.
-¿Te daban “ñáñaras” estar al lado de enorme personalidad como era Lolita Ayala?
-Una hermosa mujer, inteligente, con enorme trayectoria y en el sillón del gran Maestro.
-Cuando Jacobo regresaba ¿Te reprendía porque la hubieras “regado” en algo?
-Un día, me llama a su oficina…
-¿Ibas temeroso que te fuera a poner una severa regañada…?
-Al llegar a su oficina, le digo: ¡Jefe, jefe!!, a verlo, comprobaba que había depositado mucha confianza en mí. Me dispensaba un trato muy afectuoso.
-¿A lo mero macho, es verdad que como jefe, era un verdugo, gruñón y hasta déspota?
-Jamás fue grosero ni verdugo. Era muy educado, pero como jefe, era muy, pero muy exigente. No le gustaban las cosas mal hechas ni mal reporteadas.
-¿Era difícil para ti, construir un buen historial como reportero o te sentías muy chingón?
-¡Órale!!…
-No le saques, dime cuántas veces la cagaste…
-Antes de responder, su rostro se vuelve adusto y enrojece notablemente. Se queda meditando durante alguno segundos. Se despoja de sus lentes momentáneamente, cierra los ojos y los vuelve a acomodar en su lugar. “¡Puff!!… Mmm, este… A lo mero macho, te voy a contar una historia que me fue difícil. Un día, Jacobo me pregunta: ¿Ortega, como te sientes cuando no estoy en el noticiero? Un tanto nervioso, le respondo que no creía haberle entregado malas cuentas. Le confieso que me costaba mucho trabajo definirlo entre nervios, pero por dentro, sentía una presión de no hacer mal las cosas…
-¿…Tenías temor a quedar en ridículo?
-Quizás, era una excesiva responsabilidad. Cuando le explicaba eso, Jacobo, me da una palmada en el hombro y exclama: “Ortega, nunca pierdas eso” Créeme Edmundo, hasta la fecha, en el noticiero que estoy haciendo en El Financiero, todavía siento lo mismo.
¿Disculpa que insista, cuántas veces la cagaste?
-Una vez, se cumplían no sé cuántos años de transmisiones en la televisión mexicana, y Jacobo nos comisiona ir a la Hemeroteca Nacional para buscar, en los periódicos de la época en que arranca la televisión, con todo y anuncios, las informaciones que se publicaban en los periódicos. Voy a la Hemeroteca, tomo fotocopias de algunas cosas, la verdad, no le di ninguna importancia a lo que nos había pedido. Fui con total desgano hacer la chamba.
-¿Neta, no obstante que era una orden de tu jefe?
-Sí, te lo confieso. Cuando regresé a Televisa, para Jacobo, era muy importante. Había formado parte de ese inicio y quería encontrar esos vestigios de los periódicos de la época, para que Jacobo, pudiera dar cuenta de ello en su noticiero. Voy y le presento mi nota. Un tanto serio me dice: “No Guillermo, debe haber más cosas. Algo se te está escapando. Debiste haber buscado más” Un tanto desconcertado, se me hace fácil decirle: “Licenciado, es que no me lo pidió”
-¡Sopas!! ¿Lo estabas retando?
-Al escuchar aquello, súbitamente, se levantó de su sillón, con voz fuerte me dice: “¿Qué dijiste?” Denoté que su rostro estaba totalmente enrojecido, me arrebata las hojas que traía en la mano y me dice. “Ok, está bien. Se lo voy a encargar a alguien más. Ya te puedes marchar”
-¿Te manchaste no…?
-Cuando salí de su oficina, estaba encabronado conmigo mismo por mi estúpido comportamiento. Había descuidado la nota y le había dado una respuesta equivocada.
-¿Te corrió?
-Al día siguiente muy tempranito, vía telefónica, al pedir mi orden de trabajo, Raúl Hernández, sumamente serio me dijo: “Tiene que venir por ella a la oficina”. Cuando me presento en Niños Héroes 27, primer piso, veo que mi orden de trabajo estaba escrita en página y media. Inmediatamente, intuí que la había escrito el propio Jacobo. Cuando Raúl se percata que estaba leyendo mi orden de trabajo, se acerca y me susurra: “Le recomiendo que no falle a una sola pregunta de las que Jacobo exige una respuesta. ¡Quiere respuestas concretas de usted!!
-¿Qué era lo que había escrito Zabludovsky?
-Detalló pregunta tras pregunta, lo que quería que obtuviera yo.
-Estabas en la cuerda floja…
-No sé si te acuerdes del Rancho de Charros que estaba en Polanco y lo estaban trasladando a Constituyentes. Existía un cuestionamiento por parte de los vecinos de la Lomas, acerca si esa instalación iba a generar un grave conflicto, particularmente, de tránsito. Cuando vi el cuestionario que me había dejado, me puse las pilas y pensé en contactar a un experto urbanista para ir al lugar. En mi agenda, encontré a un destacado arquitecto de apellido Navarro, le dije que quería pedirle un gran favor. Acompáñeme al Rancho del Charro tengo que hacer una entrevista que me pidió el licenciado Zabludovsky. Son muchas preguntas y todas son de su área. Es para 24 HORAS y no puedo fallar.
-¿Qué te dijo?
-Que estaba muy atareado pero que iba abrirse un espacio. Total, ahí vamos. Todas las preguntas que había formulado Jacobo, tenían una respuesta, excepto una. ¿Cuántos vehículos caben en el estacionamiento? Era un espacio no uniforme, algunas superficies terminaban en “pico” y complicaba muchísimo poder realizar un cálculo.
-¿Cuál fue la postura del arquitecto?
-Que solamente podía darme un dato aproximado, pero no exacto. Tendría que ir al lugar y hacer muchos estudios y se llevaría más tiempo. Creo que vio la angustia en mi rostro cuando le expresé que, de no presentársela a Jacobo, me costaría la chamba.
-Uff, la tenías complicadísima…

• El arquitecto me dijo. “Mira Guillermo, ponte a escribir tu nota y voy al lugar para hacer los cálculos de manera presencial” Me quedé ahí con él, medimos la superficie centímetro a centímetro. Pero también, tenía que editar la nota. Cuando la terminé, se la presenté a Jacobo y se puso a leerla con todo detenimiento y me pregunta ¿Cuántos carros se pueden estacionar? Le dije que no se podía saber con esa rapidez, a causa de que las superficies no eran uniformes. Un tanto molesto me vuelve a decir…¿Qué no te lo pidieron en tu orden?
  -¿Trágame Tierra?
  -Le respondí: “Sí licenciado, sí me lo pidieron. Era muy clara mi orden con respecto a lo que me solicitaron investigar” Jamás había visto a Jacobo tan serio y molesto, cuando exclama: ¿Entonces, no lo obtuviste? ¿No pudiste hacer lo que te ordenaron? ¡Guillermo, si no me respondes esa pregunta, me dejas sin nada!! Esa es la pregunta crucial para saber si esta cosa funciona o no. ¡Ya no me digas nada, déjame ahí la nota, voy a ver si otro reportero puede hacer lo que tú, no pudiste!!
  -¡Tómala!!, estabas con un pie fuera de Televisa…
  -Después de estar todo el día sudando bajo el rayo del sol, midiendo la superficie con el arquitecto. Todo derrotado, le hablo al arquitecto, le suplico que me diera el dato antes del noticiero, se lo pido de rodillas. Al escuchar su voz del otro lado del teléfono, “Guillermo, me estoy apurando lo más que puedo, no voy a exponer un dato equivocado.
  -¿Materialmente, estabas ya fuera de la empresa?
  -Finalmente, ya estaba “al aire” 24 HORAS, cuando me habla el arquitecto y me dice: “Caben exactamente tantos vehículos con el estacionamiento completo. Salí corriendo al estudio “J”, desde donde se transmitía 24 HORAS, en la vieja Televisa Chapultepec. Marcial, que era el encargado de no permitir el paso a nadie al estudio mientras estaba el noticiero. Le explico que el licenciado me estaba esperando con un dato importantísimo… ¡Está bien pásele!! Cuando se van a corte, tronándome los dedos, le digo a Jacobo si podía acercarme, a lo que simplemente dice: ¿Qué quieres niño? Le respondo que traía el dato exacto ¿Estás seguro Guillermo? ¿Quién te dio el dato? Le contesto que el arquitecto Navarro -a quien, él, conocía perfectamente- Le subrayo que me había pedido no lo citáramos en la nota pero que respondía por el dato.
  -Pues no era para menos que desconfiara de ti….
  -Al momento en que el jefe de piso le avisa que iba “al aíre”, me vuelve a decir ¿Estás seguro? ¿No me voy a equivocar por tu culpa? ¡No licenciado, no se va equivocar!! Al regresar del corte, lee mi nota completita, “Es un cálculo sacado con toda precisión que nos proporcionó un destacado arquitecto, de quien nos reservamos el nombre, pero es un experto en el tema”
  -¿Te dio el crédito?
  -No, por supuesto que no. El, estaba muy metido en el tema y llegó a sus conclusiones para rematar: ¡Es una locura hacer el Rancho del Charro ahí!!
  -¿Te fuiste para tu casa?
  -No, ahí me quedé en el estudio el resto del noticiero, completamente desinflado y sin ilusiones. Al término del programa, se me queda viendo y me dice: ¡Vete a descansar niño, no lo hiciste tan mal!! Ah, no me vuelvas a responder como lo hiciste ¿Entendiste?.
  -Tu jefe te bajó del ladrillo…
  -La verdad, es que aprendí la lección. Era un privilegio trabajar con él
  -Hace 7 años que Jacobo falleció ¿Por qué hay tanta gente que lo ataca ferozmente?
  -Antes de responderte, quiero decirte que me gustó mucho la excelente entrevista que le hiciste, una de las dos últimas que concedió en vida. El gran personaje televisivo que ha tenido nuestro país fue Jacobo Zabludovsky. Era el primero en llegar a Noticieros Televisa y el último en irse. Llegaba, checaba los periódicos, se salía a desayunar o tomar café con alguna persona, regresaba. Firmaba las notas de los reporteros para que las pudieran grabar y que pasarían en el noticiero.
  -Ya que hablas de esa entrevista que me hizo el honor de conceder, me dijo que moriría siendo reportero…
  -¡Así fue!! Era un reportero exhaustivo en sus cuestionamientos. Recuerdo que envió a un reportero para que cubriera los funerales de Pedro Joaquín Chamorro en Nicaragua… ¡Fue y regresó ese mismo día con la nota y con las imágenes!! Llega todo sudoroso a entregarle la nota a Jacobo. Al leer la nota, Jacobo, exclama: “No me dice nada. No me relatas absolutamente nada, es como si no hubieras ido. Lo que aquí me dices, es lo mismo que acabo de ver en las agencias de noticias. ¿Por qué, no pusiste a qué olía el ambiente? ¿La gente cómo iba vestida, lloraban o reían? ¿Qué escuchabas de lo que decía la gente?
  -Toma chango tu banana…
  -Lo regresó de nuevo a Nicaragua. Un tanto desanimado Jacobo, le dice: “Ya no hay más tiempo, déjala así y grábala”
  -Era un maestro…
  -¡Aprendías o aprendías!!. Fue un gran, gran personaje. Si lo atacan aún que ya no está con nosotros, la gente es así… ¡Qué triste!!
  -¿Era tu gran amigo?
  -Con Jacobo, construí una relación de trabajo muy respetuosa y eficaz, pero también, una amistad sincera.
  -¿A lo mero macho, fuiste totalmente leal con él?
  -Edmundo, a lo mero macho, le fui muy leal y sin dejar de hacer mi trabajo.
  -¿Cuál fue la verdad cuando Jacobo se fue o “lo fueron” a Estados Unidos, en el sexenio de Miguel de la Madrid?
  -Creo que un poco de las dos cosas. Es una apreciación mía. Me tuve que separar un poco de Jacobo cuando me comisionan en la conducción y dirección del noticiero En Contacto Directo, que se transmitía a la media noche por Canal 5. El primer noticiero que fui titular, y que antes, conducía Ricardo Rocha.
  -¿Qué ventajas y desventajas tenía para ti, ser el titular de un noticiero?
  -Era un desafío y un reto conducir un noticiero, únicamente había suplido a Jacobo junto con Lolita Ayala, pero no había sido el titular de un espacio informativo.
  -¿El conductor de un noticiero, un simple lector de noticias?
  -No, por supuesto que no. Un titular de un noticiero, detrás de cámaras, es quien organiza, decide su formación y el orden de edición. Es quien toma y asume las decisiones. La verdad, es que me fue muy bien en Contacto Directo, con una duración de cinco años “al aíre” Me ayudó muchísimo a catapultarme.
  -¿Emilio Azcárraga y Jacobo, eran exiliados por órdenes de Miguel de la Madrid?
  -¡Tú lo haz dicho!! En 1986, según esto y así se manejó a los más altos niveles. Don Emilio, iba a dirigir UNIVISA, era la fusión de Televisa y Univisión -Lo que acaba de ocurrir hace unos cuántos días-. Bueno, también, se suponía que Jacobo iba a conducir el noticiero estelar de Univisión (Univisa), para el público hispano desde Miami.
  -No me chamaquees, dime las cosas… ¡Derecha la flecha…!
  -La verdad, es que existían serias dificultades con el gobierno de Miguel de la Madrid.
  -¿Jacobo estaba decidido dejar lo que tanto trabajo le costó construir?
  -Por supuesto que no, Jacobo iba totalmente contra su voluntad, pero no había de otra. Total, es que se van. Pero cuando llegan a Miami, la recepción que reciben fue pésima…
  -¿Por qué?
  -El público hispano de los Estados Unidos, particularmente, los cubanos/americanos, que radican en Miami, expresaban que Televisa era una empresa televisiva vendida al gobierno y que no iban a permitir la llegada de un comunicador así, para conducir el principal noticiero de allá, al que catalogaban como independiente, libre y sin censura, en fin.
  -¡Uff, pusieron entredicho a Jacobo y al Tigre Azcárraga?
  -Sí, así fue. La verdad es que cuestionaron tanto a don Emilio como a Jacobo, con lo cual, se vino abajo el plan de ausentarse durante dos años, en lo que terminaba la administración de Miguel de la Madrid. En ese inter, nombran a Guillermo Ochoa para conducir el programa Nuestro Mundo, que sustituyó a 24 HORAS.
  -¿Por qué fracasó Guillermo Ochoa?
  -No fue muy afortunado su debut en la noche, porque presentó un reportaje de Guillermo Pérez Verduzco sobre un ladrón que, prácticamente, estaba dando clases de cómo robar a través de la televisión… ¡y en un horario estelar!!
  -¿Un reportaje objeto de censura?
  -Digamos que fue un reportaje que, la misma gente reprobó inmediatamente. Fue un debut muy desafortunado. Además, Guillermo Ochoa, siendo un periodista de muy alta calidad, estaba plenamente identificado para programas matutinos.
  -¿Acaso se rompe la regla que dice que: “El que es perico donde quiera es verde”?
  -Guillermo Ochoa es un gran comunicador, escribe excelentemente bien, posee una narrativa que le llega muy bien a la gente.
  -Simplemente, hay públicos definidos…
  -¡Exacto!!, lo dijiste mejor que yo. Hay públicos definidos y la personalidad de Jacobo era muy específica para la noche. Total, a mi tocayo Ochoa, no le va muy bien, lo quitan y ponen a Lolita Ayala y Abraham Zabludovsky, pero tampoco les va nada bien, al final de cuentas, regresa Jacobo…
  -¿Zapatero a tus zapatos?
  -Sin lugar a dudas. Era el espacio del Maestro. En esa nueva etapa, se dedica a entrevistar a muy diversos personajes de América Latina y estaba regresando a su espacio natural.
  -¿Mientras tanto, tú estabas feliz en la conducción de Notivisa verdad?
  -Que bien documentado estás. En efecto, mi espacio ya no se llamaba En Contacto Directo, ahora se llamaba Notivisa, fusionaron Antena 5 y En Contacto Directo.
  -¿Cómo das el salto a la televisión matutina?
  -A la salida de Guillermo Ochoa de Televisa, me mandan a Hoy Mismo con Lourdes Guerrero, lo cual, resultó una cosa formidable. Lourdes era una extraordinaria compañera de trabajo.
  -¿Hiciste un buen “click” con ella?
  -Sí, desde el primer día. Le ayudaba mucho en la parte noticiosa y me brindó la oportunidad de fluir como entrevistador en el estudio.
  -¿De verdad?
  -Lourdes me decía que poseía un encanto para entrevistar y no sabía utilizarlo, así como una capacidad de conversación que no utilizaba correctamente, porque frente a las cámaras, me quedaba estático como un robot. “Memo, deja de ser tan rígido”, me lo decía una y otra vez. “Suéltate Memo, confía en ti” “Rompe el cristal” “Conéctate con la gente”. Me enseñó muchísimo. La recuerdo con una gran admiración, agradecimiento y cariño.
  -¿Por qué te limitabas tanto?
  -Era una parte de mi persona que no había explorado ni sopesado. Entonces, repito, le agradezco enormemente. Hubo un gran acercamiento con ella, me permitió conocer a su familia, su papá era un maravilloso maestro de piano. Su mamá, era un encanto de señora.
  -¿Adoptaste, periodísticamente a Juan Pablo Guerrero?
  -Me encanta como te metes en las fibras más sensibles de tu entrevistado. Tú serias un gran entrevistador en la televisión. Rompes con gran facilidad lo que era mi “talón de Aquiles” A Juan Pablo Guerrero me lo llevé a toda la campaña de Carlos Salinas, era el reportero designado por Televisa para toda la campaña.
  -¿Es verdad que te convertiste en el hijo “putativo” del Tigre Azcárraga?
  -Esas preguntas que disparas sin esperar. A don Emilio, lo había tratado muy poco.
  -¿Te molesta que sea tan directo? Entre gitanos, no nos leemos las cartas…
  -Me sorprendes. Edmundo, no entiendo por qué no te han dado un espacio en cualquier televisora. Tienes un gran encanto, con una capacidad de conversación muy grata, sabes meterte a la conciencia de tus entrevistados…
  -Mejor dime si eras o no el niño consentido del “Tigre” Azcárraga…
  -Viví una experiencia dentro de una elección en el estado de México que fue catastrófica. Como a dos cuadras mi casa está el hospital central de la Cruz Roja, escuché muchas ambulancias al mismo tiempo, me dicen que se había suscitado una balacera en el estado de México, de inmediato hablo a Televisa, me informan que no había reporteros disponibles. Les digo que me manden una cámara, total, me lanzo a cubrir ese evento. Al llegar ahí, los policías nos encañonaron y grabamos todo
  -¿Qué hiciste?
  -El “feeling” reporteril me llevó hasta Televisa, ya era de madrugada. Escribo la nota y le entrego el material a Raúl Hernández. En ese preciso momento, se aparece don Aurelio Pérez, era el vicepresidente de Noticieros de Televisa y me dice: ¿Usted es el reportero que cubrió la balacera del Estado de México? Sí a sus órdenes. -le respondí- “Pues acompáñeme por favor, don Emilio quiere verlo ahorita mismo”
  -¿Esperabas que te fuera a poner otra santa regañada?
  -Don Emilio tenía fama de ser muy bravo. Al llegar a su oficina, nos hizo pasar de inmediato.
  Don Aurelio le dice: “Señor, este es el reportero que cubrió este asunto del Estado de México” Le relaté a don Emilio todo lo que nos había sucedido y que la policía municipal nos había encañonado y que habían incendiado parte del pueblo… ¿Estás seguro?
  -Esa frase ya te era familiar… ¿Por qué dudaban de Guillermo Ortega?
• Sí señor, eso fue lo que vi y grabamos tal cual… ¡Espérame tantito!!, le pasan una llamada telefónica, era Jesús Reyes Heroles, el secretario de Gobernación y le dice: “Jesús, nuestro reportero que estuvo ahí, me esta diciendo, esto y esto… aquí lo tengo conmigo. Tenía su auricular en alta voz, escucho a Reyes Heroles que le decía: ¡Efectivamente, eso fue lo que pasó!!
  -¿Qué más te dijo el “Tigre”?
  -Que me quedará ahí. Que se lo contara, de “viva voz”, a Ricardo Rocha en el noticiero del mediodía. Ricardo, en ese entonces, conducía 24 HORAS de la tarde con Maxime Woodside. Otra cosa Guillermo, me dice don Emilio, “No quiero que te vayas a bañar, ni te rasures ni nada. Así quiero que te presentes con Rocha y le vas a contar todo, palabra por palabra”.
  -Tal y como te sucedió con Jacobo, ¿Eso hizo que don Emilio te subiera a su radar personal?
  -Así lo hice, me entrevistó Rocha, le detallé todo lo sucedido. Don Emilio me subió a su radar, como dices. Luego supe que a don Emilio le gustaba mucho En Contacto Directo y lo ponía de ejemplo, decía que era un buen resumen noticioso y que no entendía ¿Cómo era posible que un chamaco hiciera un noticiero de calidad y los demás noticieros conducidos por adultos, no tuvieran la misma calidad?
  -¿Y tú, esponjado como pavorreal?
  -Bueno, eso me relataron que había dicho don Emilio. Hace un momento, reconocí tu trabajo y te enojas…. ¿Quién te entiende?
  -¿Y que pasó cuando gana Salinas de Gortari la elección?
  -Ja, ja, ja. Pinche Edmundo, tienes un colmillo de elefante. Bueno, cuando llega la elección del candidato a la presidencia.
  -¿A lo mero macho, en Televisa simpatizaban con Salinas?
  -¡Indudablemente!! Zabludovsky simpatizaba con Salinas, mientras que Guillermo Ochoa era fiel seguidor de Alfredo del Mazo…
  -¿Y tu jefe Azcárraga?
  -Era obvio que con Salinas, todos lo sabíamos. Vamos todos tenían un simpatizante.
  -¿El “Tigre” les dictó línea a favor de Salinas de Gortari?
  -Fíjate que no. Al contrario, nos pidió que fuéramos rigurosamente objetivos –En ese momento, Guillermo Ortega le pide de favor a su esposa que nos tome un par de fotos para ilustrar la entrevista-… “Amore, ¿Nos puedes tomar un par de fotos por favor?”, gesto que agradecí.
  -¿Y luego?
  -En una junta editorial de los lunes, cercana a la elección del candidato, estábamos convocados los conductores de todos los programas: Raúl Velasco, Jacobo Zabludovsky, Ricardo Rocha, Lolita Ayala, Lourdes Guerrero, vamos, todos. El señor Azcárraga nos dice: “El PRI, aún no tiene candidato, pero nosotros, ya sabemos quien será nuestro representante permanente en la campaña de quien resulte candidato. Era un silencio sepulcral, todos voltearon a verse entre sí. En eso, don Emilio con ese tono de voz fuerte que le caracterizaba, exclama: “Yo les dije señores que no jugaran por nadie. Objetividad, que no se fueran con la finta y ya sé que todos tienen a su favorito.
  -Estabas en tu etapa de madurez juvenil?
  -Órale, tenía 32 años de edad y quitado de la pena…
  -¿Y qué más les dijo el “Tigre”?
  -Señores, nuestro representante permanente en la campaña de quien resulte candidato, será Guillermo Ortega…
  -No manches, te estaba confrontando con tus compañeros…
  -“Como lo escucharon señores, Ortega estará en la campaña de quien resulte candidato a la presidencia de México. Asimismo, les pido que sean equilibrados y respetuosos con cada uno de los distinguidos priistas.
  -¿A lo mero macho, en Televisa eran soldados al servicio del PRI?
  -Mmm…
  -No le saques…
  -Sí, don Emilio así lo decía, que Televisa era soldado del presidente de la República.
  -¿Qué te dijo, te dictó después de la elección presidencial?
  -Recuerdo que don Emilio asistió a un par de etapas de la campaña…
  -Desde tu perspectiva ¿Manuel Clouthier y Cuauhtémoc Cardenas, representaron una oposición real?
  -Claro que sí, aunque existe la historia de que si ganó o no. La realidad y desde mi perspectiva, como lo mencionas, es que las cosas fueron tal y como sucedieron. Cuando terminó la campaña y lo declararon, cuestionadamente vencedor. Don Emilio se había ido de viaje, seguramente habría estado reflexionando. A su regreso, me citó en su oficina.
  -¿Te esperaba otra regañada?
  -¡Eso es lo primero que pensé!! Por dentro me dije: ¿Guillermo, ahora que chingados hiciste? Voy a su oficina de San Ángel, estando en la antesala, observo que salía Silvia Pinal. Mientras tanto, platicaba con Rafael Reséndiz, uno de sus asesores en temas políticos. Al estar frente a él, dentro de un tono amable, inicia un monólogo y me dice: “Mira Guillermo, durante todos estos años, el PRI mostró que podía hacer las cosas. Que podía mantener al país en calma, con cierto desarrollo, crecimiento y las cosas bajo control. Nosotros, decidimos jugar con ese partido porque vimos que hacía las cosas de una manera que sostenía la paz. Pero vemos, que en esta elección, eso ya no existe”.
  -¿Estaba pintando su raya?
  -Continuó diciendo: “He pensado que si Televisa no cambia, la gente va a cambiar a Televisa”
  -¡Sopas!!…
  -En efecto, estaba completamente consciente que Televisa tenía que cambiar, de manera prudente y responsable y agrega: “Siempre he tenido un área que me ayuda en la información y la conteníamos, tratando de facilitar la gobernabilidad en el país, pero eso, ya no es así. Te quiero invitar para que te integres conmigo al frente de una dirección que vamos a formar y me ayudes a conducir el cambio de Televisa”.
  -¿Nada es para siempre?
  -Me dijo, claramente que teníamos que abrir las puertas de Televisa a todas las expresiones políticas. “La gente ya estuvo a punto de cambiar al PRI, pero que cambien a Televisa, esa era su responsabilidad”
  -¿Qué pensaste en ese momento?
  -Me dijo que, si aceptaba la propuesta, me necesitaba las 24 horas de los 365 días del año. No le importaba, en lo más mínimo, lo que estuviera haciendo, pero a la hora que me necesitara, debería de estar ahí, proporcionándome todos los elementos necesarios para facilitarme el trabajo. Esa oficina se llegó a convertir en muy poderosa porque hacíamos bien la chamba.
  -¿Era algo así como el Pentágono de Televisa??
  -Sí, la verdad es que así fue, preveníamos a don Emilio cuando veíamos algo que marcaba focos rojos. Él, siempre contestaba.
  -¿Te ganaste el desprecio de tus compañeros?
  -En efecto, me resultó una muy dolorosa situación al percibir que, a mis colegas, les resultaba muy incómodo que les transmitiera una instrucción, así fuera de don Emilio.
  -¿Nadie es monedita de oro?
  -Dentro de esa dirección a mi cargo, había un personaje, Nacho Lagunes, quien duró muchísimos años en Televisa y que ahora colabora conmigo en El Financiero Bloomberg. Nacho, era quien comunicaba a Jacobo y a todos los demás, las instrucciones de don Emilio.
  -¿Un estúpido celo?
  -Uff…
  -¿Te hubiera gustado que fuera al revés, que recibieras instrucciones de don Emilio a través de su bolero personal?
  -Si hubiera sido al revés… ¡Por supuesto, que hubiera sido muy incómodo para mí!!
  -¿Una desafortunada inmadurez profesional de ambas partes?
  -Es que éramos compañeros y trabajábamos en la misma empresa… ¡Éramos iguales!! Por eso decidí que fuera Nacho quien les transmitiera las instrucciones del Tigre y opté por llevar la fiesta en paz para darle buenos resultados a don Emilio.
  -Lo que no entiendo, ¿Cómo lograste hacer a un lado a Jacobo, Guillermo Ochoa o Ricardo Rocha, quienes gozaban de toda la confianza de don Emilio Azcárraga?
  -No lo sé. Yo mismo estaba sorprendido Quizás, don Emilio se percataba que siempre estaba al pie del cañón, a la hora que fuera. Multitud de veces lo llegué a despertar en su barco porque había un tema de emergencia.
  -¿Qué es lo que hacía encabronar a don Emilio?
  -No saber las cosas con inmediatez o que lo engañaras. Que le quisieras tapar el ojo al macho. Pero lo que lo ponía “fúrico”, era que no asumieras tu responsabilidad. Tampoco soportaba medias verdades.
  -¿Que le hablaras al chile?
  -Sí, era su palabra favorita: “háblame al chile”. Una y otra vez expresaba: “Dime las cosas como son y si la cagaste, pero ten los guevos para decirlo”
  -¿Cuántas veces te cagaron?
  -Uff… ¡Vaya entrevista!! Me tienes sorprendido. Mira, sí me cagaron pero nunca di pie para haberla merecido. Pero tampoco recibí una de esas de las que don Emilio se esmeraba en hacer. Una de ellas, fue en torno a una comida que iba a sostener con el entonces secretario de Gobernación, don Fernando Gutiérrez Barrios, me pidió fuera el interlocutor para agendarla. Acordamos día y la hora, pero resulta que, una hora antes de la hora fijada, ya estaba don Fernando en el lugar fijado, pero inexplicablemente, media hora después se retiró, no obstante que se le avisó que don Emilio ya estaba en camino. Uff, me puso una santa cagada. Cuando regresó a su oficina, me gritó, me dijo que era un pendejo.
  -¿Qué hiciste?
  -Fui y le presenté mi renuncia y me dice: “No me hagas encabronar más. Deja de decir pendejadas y rompió la renuncia. Tengo la impresión que don Fernando quería doblar a don Emilio y no encontraba la forma de hacerlo… ¡y lo logró!! Fue algo totalmente deliberado por parte de don Fernando Gutiérrez Barrios.
  -¿Por qué aceptaste? ¿No es mejor ser borracho que cantinero?
  -Era septiembre de 1988, me estaba poniendo oficinas en San ángel como en avenida Chapultepec, su plan era que, entre los dos, generaríamos ese cambio en Televisa. Nos comisionó a Jacobo, Reséndiz y a mí, para que convocáramos a todos los lideres de los partidos políticos. Así fue como tuvimos interesantes entrevistas con Carlos Castillo Peraza, que fue presidente del CEN del PAN, Heberto Castillo del PRD, Cuauhtémoc Cárdenas y Aguilar Zínser y Aguilar Talamantes, todos los líderes de los partidos
  -¿Qué papel jugabas en esas reuniones?
  -El interlocutor permanente…
  -¿Televisa que ofrecía a cambio?
  -Piso parejo para todos, tanto en los procesos electorales y lo que los partidos nos solicitaran. Que era un nuevo México y en ese nuevo México tenían cabida todos. Se empezaron hacer encuestas de salidas en las elecciones, cosa que era impensable. Realmente empezó una reforma política electoral en todo el país, acompañada por el medio de comunicación que tenía mayor influencia, que era Televisa, sin lugar a dudas.
  -¿Con todo ese poder, estuviste a punto de convertirte en un tipo soberbio y fatuo?
  -No, porque volvemos al tema de los valores. Creo que son los valores los que te hacen permanecer con los pies en la Tierra, dentro de todo lo posible.
  -¿Traicionaste a tus amigos, debido a esa sobrada posición de absoluto poder?
  -Mi papá decía: “Nunca defraudes a quien confía en ti. Nunca seas desleal a quien te es leal.
  -¿Morder la mano que te da de comer?
  -Eso, también mi papá lo decía y en el sentido profundo de los valores.
  -Mi pregunta es si mordiste la mano que te dio de comer desde que empezaste de abajo…
  -No Edmundo, jamás he hecho eso, ni lo haré… ¡Eso no va conmigo!!
  -¿Por qué fracasó Eco?
  -Creo que fue el momento y la fórmula. Si recuerdas, habíamos puesto Eco dentro de la programación de Televisa y sin lograr tener éxito con la gente de México. No cabe duda que era una gran visión de Jacobo como parte de un sistema internacional de noticias, pero en México, no formaba parte de los programas que quería ver la gente.
  -¿Cómo nace Al Despertar?
  -Le pido a don Emilio, una oportunidad para hacer un programa informativo, pero al mismo tiempo, ameno, agradable, versátil y con conductores que le llegaran a la gente, con la participación de Ana María Lomelí, que tenía su encanto. En los deportes, estaban Toño de Valdéz, Javier Alarcón y Raúl Orvañanos, hacían su mitote deportivo. En Al Despertar, fue formar una familia de comunicadores con la que la familia mexicana, desde sus hogares, se identificaba perfectamente. Les gustaba mucho los enlaces desde el helicóptero de Rolando Medina (QEPED) Contenía una fórmula que estrechaba mucho a la gente. Se acompañaba con nosotros, se informaba y divertía.
• ¿A lo mero macho, te dolió dejar Televisa?
  -¡Madres!! Uff, me la sueltas así de repente. Mira, la verdad es que no…
  -¿Lo dices de dientes para afuera…?
  -Te digo que no, por la razón de que estaba en la cúspide de mi carrera y lo que iba a suceder con los nuevos directivos…
  -¿Es mejor decir adiós a tiempo?
  -¡Exacto!!, los nuevos directivos se estaban deshaciendo de todo lo anterior, por lo tanto, iban a debilitar mi posición hasta que me fuera por aburrimiento.
  -¿Te querían desgastar estúpidamente?
  -Ya lo dijiste bien. Era desgastarme y me percaté de eso a través de varios avisos, uno de ellos, fue una suspensión, no obstante que hablé con Emilio Azcárraga Jean, sin obtener una respuesta positiva de su parte. Si no contaba no con el respaldo de Azcárraga Jean, los nuevos personajes al frente de la televisora, estarían mermando mi posición hasta mi salida por hartazgo.
  -¿Lo mismo que le sucedió a López Dóriga?
  -No, a Joaquín le duró un poquito más la sonaja. Para los nuevos directivos, supuestamente, Joaquín era un invento de ellos, pero ni Ricardo Rocha o Adela Micha, éramos un invento de ellos. Detrás de mí, salieron Jacobo y Abraham. También ya se había ido Rocha. Lolita Ayala se quedó poco tiempo más, porque es una gran señora, respetada y admirada.
  -Ya no me lleves por el callejón de los despidos… ¿Te dolió o no salirte de Televisa?
  -Como ya sabía por qué me iba, la verdad es que no me pesó.
  -¿Te hubiera gustado quedarte más tiempo, siendo objeto de un criminal hostigamiento?
  -Sí, sí me hubiera gustado. Para que te digo que no.
  -¿Trabajar toda una vida, escalar buena posición y que te den una patada en el trasero?
  -Eso es, trabajar por una posición y que a los dos años te tengas que ir pero no por ineptitud, mucho menos, por no tener éxito sino por formar parte de un equipo al que estaban empeñados en desaparecer.
  -¿Viva el rey… Muera el rey?
  -Mira Mundo, vuelvo a estar en un noticiero estelar de las diez de la noche en El Financiero Bloomberg, una marca muy prestigiada. Un diario y un canal de televisión que han edificado un prestigio. Estoy feliz.
  -¿Le haces la competencia a Ciro Gómez Leyva en Imagen Televisión?
  -¡De ninguna manera!! Ciro Gómez Leyva merece todo mi reconocimiento, admiración y respeto. Es un periodista respetable. Un extraordinario profesional de los medios. Además, Ciro está en televisión abierta, y yo, en televisión de paga. Ciro es una magnífica persona y un gran mexicano.
  -Antes de concluir esta conversación ¿Qué demonios te sucedió en Imagen Radio?
  -Lo que funcionó muy bien, fue Reporte 98.5 de FM, porque estábamos replicando Al Despertar, pero en radio…
  -¿Las segundas partes son buenas?
  -¡Fue un exitazo!!, debo decirlo. Tan fue un exitazo, que le hizo sombra a la estación hermana de grupo Imagen 90.5 de FM, los patrocinadores se querían anunciar más con nosotros que con la otra emisora.
  -¿Otra vez, pisando “callos”?
  -Entonces, devolvieron Imagen Radio y dejaron 98.5 en otras manos, total, todo se acabó. En los dos años en que permanecí “al aíre” en 98.5 FM, fue un éxito rotundo.
  -¿Zapatero a tus zapatos?
  -Muy bien querido amigo, me ayudas a responder tus preguntas… Sí, zapatero a tus zapatos.
  -¿Cómo catalogas tu paso como director general del periódico Crónica?
  -Fue una buena experiencia, aunque, la verdad, jamás había tenido la oportunidad de dirigir un periódico. Jorge Kawachi me invita ser presidente adjunto y director general de Crónica durante ocho años, pero se cumplen ciclos.
  -¿Qué sucede cuando los empresarios y dueños de los medios se obstinan en manejarlos?
  -¡Que excelente pregunta!! Hace un momento me dijiste que zapatero a tus zapatos, así es que, cuando los empresarios y dueños de los medios quieren dirigirlos, aunque son los dueños, no es sano que lo hagan. Cuando esto sucede y se aferran en imponer visiones empresariales sobre visiones periodísticas, es una terrible idea. A eso, obedeció mi salida de Crónica.
  -¿Y en Guadalajara que sucedió?
  -Estás perfectamente bien informado de mi actividad… ¡eh!! En Guadalajara, mi esposa y yo, de la mano de José Aguirre Campos, un destacado empresario mexicano, abrimos el diario NTR, que había tenido un éxito en Zacatecas. Asimismo, compramos unas estaciones de radio que pertenecían a Radiópolis, así como el grupo ABC Radio que era de don Mario Vázquez Raña, en donde continúo haciendo radio.
  -Memo, a lo mero macho, ¿Te las truenas?… Vaya, parece que no te cansas…
  -Ja, ja, ja. A ratos sí, si me canso. Pero luego descanso y se me olvida… ja, ja, ja.
  -¿Un periodista como tú, tiene caducidad?
  -Uff, no lo sé. En mi caso, no me veo apartado de los medios. Ni me veo apartado de las realidades que hay que relatar en los medios. Tampoco veo a la gente apartada de la posibilidad de que yo le cuente esas historias.
  -¿Y si ello llega a suceder, por fin, te iras a rascar la barriga?
  -Si en algún momento eso llega a suceder, todos tenemos nuestro ciclo y no tendré inconveniente en hacer periodismo desde otra perspectiva
  -Después de todo lo que me has contado… ¿Un periodista nace o se hace?
  -Creo que las dos cosas…
  -…¿Guillermo Ortega nació siendo periodista?
  -Digamos que literalmente sí. En mi cabeza, siempre estuvo presente el deseo de serlo, pero se hace, en las lecciones, muchas de las cuales, te he platicado hoy. Enormes experiencias que te van dando tus jefes, tus compañeros y la vida misma. Te haces periodista en la práctica. Tú, eres unos de los mejores entrevistadores que actualmente hay en México, me siento honrado por esta grata conversación.
  -¿Te gustaría impartir clases de periodismo?
  -Hace un momento me dijiste una frase que me gustó mucho…
  -…¿A lo mero macho?
  -No, esa, es tu sello o rúbrica…
  -¿Entonces…?
  -Me dijiste que zapatero a tus zapatos y… A lo mero macho, un semestre estuve dando clases en la Carlos Septién, y como soy yo…
  -¿Un verdugo con los chavos?
  -Algo así, no dejaba de revisar los mínimos errores de redacción…
  -No te de pena decírmelo ¿Eras un ogro con los chavos?
  -Siempre he pensado que, quien quiera estar en tu clase debe estar al ciento por ciento. Cuando llegaba al salón les decía: “Jóvenes, vamos a empezar la clase. En buena onda, quien no quiera estar presente, se puede retirar y les aseguro que no tendrán inasistencia, ojalá pasen el examen. Pero quien quiera permanecer, son bienvenidos, lo que me demuestra que tienen interés”
  -A Televisa ¿Se le está acabando el tanque de oxígeno y se le ve moribunda?
  -Son nuevos tiempos y los nuevos tiempos, siempre, traen nuevos desafíos y no he visto que los nuevos directivos hayan sabido entenderlos. Ni tampoco he observado que hayan sabido sortear los grandes desafíos.
  -¿A lo mero macho, está condenada a desaparecer no obstante su fusión con Univisión?
  -Televisa ya no es lo que fue. Las compañías tienen sus épocas de pujanza y también sus etapas de crisis, tanto en la penetración hacia el público, como en los ingresos y en las ventas y como en el éxito de sus programas.
  -La gente ya no ve mucho la tele y prefiere ahora las plataformas…
  -La gente consume los contenidos estén donde estén. Es sorprendente que los jóvenes vean las plataformas a través de sus celulares y buscan contenidos interesantes.
  -¿Qué te dice el nombre de Javier Alatorre?
  -Es un destacado periodista, ya lleva muchos años al aire.
  -¿Qué opinas de la constante denostación y ataques que sufren periodistas y ciudadanos desde Palacio Nacional?
  -Es una irresponsabilidad que no corresponde al Jefe del Ejecutivo Federal. Este es un presidente que debería gobernar para todos los mexicanos y no para un puñado de ellos. López Obrador debería ser un presidente que debería gobernar acompañándose de las fuerzas políticas, que siempre tienen algo importante y valioso que aportar y no confrontándolas todos los días desde las mañaneras.
  -Elena Poniatowska me dijo en entrevista que las mañaneras son un hartazgo…
  -Leí tu estupenda entrevista y me parece muy acertado lo que ahí te expresó.
  -¿A ti, nunca te ha atacado YSQ?
  -Un par de veces ha hecho referencia a mi persona, lo referido por el programa Con Ortega a las Diez, que se transmite por la señal de El Financiero Bloomberg, en la sección de las mentiras de los miércoles, pero lo más curioso, es que mienten al hablar de mentiras.
  -¿En México puede darse un Watergate en Palacio Nacional?
  -No veo cómo, cuando hay un Fiscal a modo. No veo cómo, cuando tienen una mayoría simple en el Congreso de la Unión y una mayoría a modo. Se ponen de tapete al presidente. Tampoco veo cómo, cuando tenemos un presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación que genera cuestionamientos, porque no se pronuncia claramente, respecto a temas como alargarle el periodo y cuando es ambiguo en determinada decisión, cuando se presume que contó mal los votos, respecto a la ley de la industria eléctrica, lo que hace suponer, que es un ministro de la Corte a modo.
  -¿Es el presidente más ignorante que hemos tenido?
  -Se ha equivocado infinidad de veces, hasta en fechas históricas, cuando se supone que es el presidente y que conoce mucho de nuestra historia.
  -¿Intelectualmente, qué calificación te merece?
  -Intelectualmente, no me merece un respeto.
  -¿A ti, te representa como tu presidente?
  -A mí, ¡No!!
  -¿Guillermo Ortega es rico?
  -No, no y no. Quizás, tengo los pocos bienes que corresponden a los salarios que me han pagado las diferentes empresas en donde he trabajado.
  -¿Eres un periodista “fifí” y “chayotero”?
  -Eso de “fífí”, quizás sí lo sea, porque me gusta vivir bien. ¿Chayotero? Jamás he recibido embutes ni nada por el estilo. Me dedico al periodismo de tiempo completo, te repito, los pocos bienes que tengo…
  -Veo que no vives en la opulencia…
  -Qué bueno que seas tú quien lo dice. Mira, esta casa en donde estamos, la rento porque mi casa está en Guadalajara. No mi querido Mundo, no vivo en la opulencia.
  -¿Escribirás tus memorias?
  -No, no lo sé.
  -¿Me estás dando el avión?
  -Me parece que construir las memorias es un acto de egocentrismo
  -Antes de irme, me puedes decir ¿Cuánto dinero trae en su bolsa el destacado comunicador?
  -Al escuchar esto, su rostro refleja sorpresa, levemente enrojecido, se levanta del sillón en donde permaneció sentado a lo largo de la entrevista. Lentamente, procede a vaciar las bolsas de su pantalón y me dice: “Vaya, manera de rematar la entrevista. ¿Cuánto dinero traigo en mi bolsa?, lo que se puede traer y lo que va quedando de los gastos. La verdad, es que no me gusta traer dinero en efectivo. Uso tarjetas de crédito y débito.
  -Memo, ¿Qué sientes ser entrevistado?
  -Con gente como tú, me siento sorprendido y agradecido porque, más que una interesante entrevista, fue como una deliciosa charla de café.
  -¿Te sentiste en el banquillo de los acusados?
  -Es que los periodistas no somos dados a dar entrevistas, sino buscarlas. No he dado entrevistas y acepté, sólo porque eres tú.
  -El ciudadano Guillermo Ortega ¿Qué opina del periodista Guillermo Ortega?
  -Uff. ¿No te cansas de preguntar?
  -¿Tú, ya te cansaste de responder?
  -A Guillermo Ortega el ciudadano, le cae a toda madre el periodista Guillermo Ortega.
  -¿Ya diste el viejazo y no regresarás a la tele abierta?
  -Ja, ja, ja. No, no he dado el viejazo. No hay un pronto regreso a la televisión abierta porque no quiero.
  -¿No te llegan al precio?
  -No es eso, estoy muy contento con lo que estoy haciendo con El Financiero Bloomberg. Esa es la verdad.
  -Memo, muchas gracias por tu tiempo ¿Deseas agregar algo más?
  -El agradecido soy yo. Posees un enorme talento y de verdad, eres uno de los mejores entrevistadores que hay en México.