Con bombo y platillo el perredismo desde el Comité Nacional como el Guerrerense, celebraron el raquítico 35 aniversario del Partido de la Revolución Democrática, PRD, partido que en el proceso electoral pasado del 2021 perdió el registro nacional en 17 estados, pero en Guerrero fue festejado presumiendo más al político que han convertido en suerte de su hombre fuerte, para muchos casi “nuevo concesionario” Ángel Aguirre Rivero, y un ánimo desbordado hacia el futuro, a diferencia de expresado por el Ingeniero Cuauhtemoc Cárdenas Solórzano hace unos días, “El PRD se encuentra más lejos que cerca de lo que se propuso al ser fundado”.
Fundado en 1989 por el Ingeniero Heberto Castillo Martínez, quién cedio el nombre y siglas al nuevo partido, acompañado de Demetrio Vallejo, Cuauhtemoc Cárdenas, Profirió Muñoz Ledo y Luis Villorio, entre muchos otros, como resultado de una lucha que les costó a los precursores de la “Reforma Política” y ser protagonistas del Movimiento del 68, y su inmediato encarcelamiento y sentenciados por Sedición Social” en Palacio Negro de Locumberri.
En Guerrero el Doctor Rosalio Wences Reza fue el primer dirigente del Comité Directivo Estatal, con un grupo de dirigentes que hicieron historia para que él extinto gobernador José Francisco Ruíz Massieu lo llamara “el partido de la sangre y la violencia”, gobierno en el que él Secretario de Desarrollo Económico era Ángel Aguirre Rivero, hoy hombre fuerte del PRD en Guerrero.
Entre otros dirigentes estatales que enfrentaron fuertes etapas de cerrazón nacional y local por el sistema estuvieron Octaviano Santiago Dionisio,(+), Félix Salgado Macedonio, (quién abandonó a Cuauhtemoc Cárdenas, para unirse a AMLO quién le permite y tolera todos sus excesos); René Lobato Ramírez, Ranferi Hernández Acevedo, Eloy Cisneros Guillén, Martín Mora, (hoy en Morena, cacique de Tlachapa, ex suegro de El Pez), Guillermo Sánchez Nava, (con años paralizado por golpiza de priistas), Sebastián de la Rosa Peláez, (convertido en chapulín, ex PT, hoy en MC), Ricardo Barrientos, Carlos Reyes Torres, Carlos Reyes Payán, (hoy en Morena).
El PRD en Guerrero se ha convertido en una suerte de franquicia, en la cuál se puede adquirir su producto principal y más codiciado al mejor postor, las próximas candidaturas. Pero lo que se advierte es que tendrán que ir en coalición o en alianza con otras fuerzas políticas, con las que tendrán que dividir el pastel y seriamente carecen de un fuerte capital político que ofrecer en el momento de la puja. Hoy en el festejo de su 35 Aniversario, lo único que ha sido notorio, además de presumir a su jefe político, como escribiera el guanajuatense Jorge Ibargüengoitia, son: “Estas Ruinas que Ves”.