Cómo titular del gobierno de Guerrero Evelyn Cesia Salgado Pineda, reunida con un amplio sector los medios de comunicación de Guerrero, por la conmemoración del Día de Día de la Libertad de Expresión, representó lo que es, con un mensaje suave y adulador; pero representa otra figura cuando son requeridos los gobernadores y gobernadoras de Morena para pronunciarse en contra del INE y últimamente contra la SCJN, sin consultarlo con los ciudadanos qué le dieron el voto, y con ello pinta de cuerpo entero quién los promueve. Mostrando con ello el innegable papel y poder ideológico del poder ante los medios, y con plena sororidad ante la catástrofe del incendio del Mercado Central.
Hace semanas el gobierno del estado inauguró un novedoso proyecto para darle una vuelta de timón a lo qué denominaron como un cambio total en la forma de comunicar e informar todas y cada una de las acciones del gobierno de Evelyn, la que se preveía como la instauración de mecanismos que permearan en una nueva configuración y acercamiento con los medios y vertical y transversal con los guerrerenses, en tanto, existen y se mueven en sus “peceras” funcionarios que piensan qué su palabra es la palabra y la voz de “Jehová”.
Cómo ningún otro régimen federal, el actual se ha caracterizado No por ser diferente, sino por una guerra permanente contra los medios que han mantenido una política firme de contrapesos ante la brutal insistencia de lograr el control de los medios de comunicación, y no solamente a ellos, e instaurar su nuevo modelo de los “aparatos ideológicos del estado”, en favor de la 4t, y lo qué eso pudo significar.
Evelyn a mantenido un manejo terso sobre el asunto mediático, insistiendo en una libertad de expresión, qué hoy está lejos de tener sentido ante el arribo de las nuevas tecnologías de comunicación y la guerra de las nuevas y gigantescas empresas y los gobiernos mismos cómo lo es el mexicano qué utiliza sin duda el poder de la presión política y los multimillonarios recursos federales, el qué ha luchado de manera perversa por el control ideológico de los medios, aprovechando además la pobreza de la formación académica e ideológica de quienes hoy se dedican a ello, y lo qué pretendan de eso.
En Guerrero existió una época dorada del periodismo, un periodismo instaurado por insignes profesionales y con una madurez qué formó escuela en la entidad,
pero qué jamás pasó de ser local, sin penetrar en la audiencia nacional, pese a los firmes apoyos oficiales de gran alcance, qué con el tiempo terminaron cerrando sus redacciones y cómo tal sus talleres de impresión, por la falta de visión que se percibían ya en los grandes y profundos cambios para llegar a las mayorias y penetrar en sus definiciones, sus gustos y moldear sus anhelos y hasta sus estatus políticos, dejando en la calle a un sinnúmero de trabajadores sin su sustento y qué hoy rudimentariamente se han integrado a las redes sociales, en el nuevo boom del llamado periodismo cibernético…con las secuelas inherentes.
“No se debe lucrar con ninguna desgracia, expresó la gobernadora bajo los rayos del sol, menos con lo que les ocurrió a todas y todos ustedes”. Expreso Evelyn ante mujeres y hombres de todas las edades, locatarios, comerciantes, empleados y toda de la diversa ocupación del mercado siniestrado, escucharon y fueron escuchadas, convencidos de la solidaridad plasmada y redactada con su voz y la empatía sudorosa y lagrimas que conjugaron el compromiso: “el mercado se construirá en el menor tiempo posible”.
No cabe duda que gobernar es mucho, pero mucho más que alcanzar y controlar los llamados “aparatos ideológicos del estado”. La empatía ante la desgracia también lo es, pero tiene un gran significado. Ser transparente ante los gobernados.