Carmen Parra es una de esas mujeres quien luchó en el pasado en filas revolucionarias, en la construcción la Constitución política de 1917 y en diversas luchas proletarias por un nuevo pacto social, donde condiciones de vida para las mujeres estuvieran incluidas.

Carmen Parra, también conocida como «Coronela Alanís», combatió contra el régimen porfirista y participo agrupaciones feministas obreras, después de la revolución.

Se incorporó a las filas revolucionarias en 1910, bajo las órdenes de Antonio I, Villarreal, Lázaro Alanis y Mar Caraveo.

Carmen trasladaba parque para las fuerzas de José Inés Salazar y llevaba mensajes de Francisco I. Madero a la Junta de Bustillos o a Casas Grandes, en el estado de Chihuahua.

En 1911 se incorporó a las tropas de Francisco Villa. Se encargó de buscar e incorporar elementos para batallas de Conejos, Rellano, La Cruz y Bachimba, registradas durante el levantamiento de Pascual Oro contra Madero.

Dos años más tarde participó con Villa en la toma de Ciudad Juárez y en la toma de Ojinaga, Chihuahua.

La «Coronela Alanis» prestó ayuda a la División del Norte, durante el avance sobre Torreón, Coahuila. También participó en la Convención de Aguascalientes, donde fue aprehendida por conducir documentación del general Emiliano Zapata al general Gildardo Magaña, en Perote, Veracruz.

Fue liberada, casi de inmediato, por órdenes del general Cándido Aguilar y se incorporó a las filas constitucionalistas, de 1916 a 1918.

Fue comisionada para obtener la amnistía de los revolucionarios que se encontraban en El Paso, Texas, y también formó parte de la comisión para amnistiar a los villistas.

Concluida la revolución, participó en varias agrupaciones feministas sobre todo de carácter proletario, las cuales tenían por visión la lucha por el respeto a los derechos laborales y la ciudadanía plena de las mujeres.

Carmen Parra fue reconocida oficialmente como Veterana de la Revolución, en 1942, un año después de su muerte.

La «Coronela Alanis» destacó por su entrega a la causa revolucionaria, por el cambio social, por cortar las cadenas y dotar de libertad al pueblo mexicano.

Una mujer de armas tomar como podemos leer, con temple y valor, mujeres que dedicaron su vida a las causas por una mejor estilo de vida, por cambiar la politica de esta país, sin duda una de las tantas mujeres que la historia no les ha hecho justicia al no ser tan reconocidas y que marcan una de las grandes historias del feminismo, donde las mujeres si tuvieron una participación importante en todas lasa épocas en esta ocasión de la revolución.

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