A la expresidenta de la CANACINTRA en Acapulco Yoloczin Domínguez Serna, nada le ha sido fácil, nada le ha sido regalado, además de encontrarse frente a un mundo donde pese a su formación ya no digamos escalar, sino caminar no ha sido difícil sino complicado, donde las señales y símbolos tienen un irrefutable origen de género, con los cuales y desde su primer momento como diputada electa de Morena por el Distrito 3 Electoral Local, de la zona urbana de Acapulco, tuvo que poner los puntos sobre las “ies” ante un panorama que ya percibía incierto y que a la postre el tiempo le daría la razón.
Definida sus características como diputada de la LII Legislatura Local, y como presidenta de la Comisión de Transparencia, Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales del Congreso Local, ha reconocido públicamente que el Poder Legislativo de Guerrero se encuentra en los últimos lugares de transparencia en la Evaluación del Colectivo Ciudadano por Municipios Transparentes, que cayó como bomba dentro del recinto legislativo al verse exhibido cuando durante más de dos años y dónde han pasado cuatro coordinadores parlamentarios, muestra la total falta de homogeneidad en un cuerpo que se ha distinguido por sus imprudencias, su falta de quehacer político y sobre todo el verse comprometido al poder omnimodo de un sólo personaje, Pablo Amilcar Sandoval Ballesteros y su grupo que a la postre tiene sumido al Congreso de Guerrero en la total ignominia ante la opinión pública, y quién además pretende cínicamente se le entregue la candidatura del Distrito 04 Electoral Federal a una de sus incondicionales, a la diputada local por el distrito 04, Mariana Guillén García.
Pese a ello y remar contra corriente la diputada Yoloczin Domínguez Serna, cómo diputada local por el Distrito 04 y con una pandemia de por medio, a mantenido una firme
estrategia de trabajo en el campo como una promotora incansable en la búsqueda de soluciones a los problemas más ingentes de los ciudadanos de su distrito y que hoy por hoy pretende y está dispuesta a representarlos en el Congreso de la Unión, como su diputada del 4o Distrito Federal Electoral…una tarea que asume de ya como un imperativo de su labor más allá de lo legislativo.
Yoloczin Domínguez Serna a definido claramente que no está casada con el poder, su visión es la búsqueda del bien mayor, en tiempos de una contingencia de salud como el mundo no había padecido en los últimos cien años el Sarc2-Covid 19, y que continúa arrebatando vidas y recursos ya incuantificables y que pese a ello con una voluntad inquebrantable mantiene fuerza y determinación para lograr su objetivo, pese a tener en contra al sordido equipo lídereado por el ex delegado Amilcar Sandoval, quien apoya a la diputada Mariana Guillén García, de oscuro pasado y opacos resultados como funcionaria al frente del programa estatal “Guerrero cumple alfabetizando” (1993), y que fue retirada del mismo por el gobernador Angel Aguirre, por obvias tazones, y cuyo trabajo en la actual LII Legislatura a pasado sin pena ni gloria.
Yoloczin representa una generación de políticos que las propias necesidades de la naturaleza y las exigencias imperativas de la política han formado en el crisol de la constancia y no se ha dejado amedrentar por los estertores gritos del poder alucinado, que bien conoce cómo dicta el poema, “el ave canta aunque la rama cruja, sabe muy bien para que son sus alas”.
