Probable homicidio, delito ¡Evidente! Nada que ver con la adicción personal.
No dejes te confundan con el afán mezquino de ¡Encubrir!
De empañar la imagen y justificar la ¡Muerte!

Hoy es el actor, mañana podrías ser tu hijo.

Vileza de aquellos que comercializan la privacidad y evidencian la mezquindad.

El del delito, requiere ¡Castigo! Ejemplar, freno al abuso y erradicar la impunidad.

El otro, el del abuso a las drogas, atención médica.
Acciones contra la ¡Adicción! Juvenil, hoy en el olvido por todos los gobiernos.

Aquellos, los de la vileza de compartir la privacidad, ¡conciencia! Y sensatez al dolor ajeno.

¡Empatía!
No hipócrita acompañamiento en el triunfo, traición en la adversidad.

Podredumbre unos y otros, que abusan y son cómplices del obligado a servir y cuidar, no a ¡Matar!

Gobierno omiso, de podridas entrañas que solapa y protege.

Adversario sólo en lo político, cómplice en la mala actuación de autoridad.
Guarda ¡Silencio! ¡Omite!

En Secuaz de obvia supresión y ¡Mentira!
Actuación policiaca de ¡Excesos! e impunidad permanente, tan cotidianos, como similares aquí y allá.

Con gobierno populista, como neoliberal.
Tan podridos unos, como putrefactos otros.
Ciudadanos con miedo, olvidados.
Presas de delincuentes y asesinos con insignia y ¡Uniforme!
Jóvenes inexpertos y temerosos a los que debieran proteger.
Policías indolentes, sin aptitud ni vocación, menos ¡Entrañas!
Vil ¡Rapiña! Simples ¡Buitres! Del momento.
Grito social uniforme ¡Basta! Policía corrupta y abusiva.

No más ¡Impunidad! Ciudadanos comunes, permanentes víctimas de su podredumbre policiaca.
Acciones omisas de mandos superiores, corrompidos e insertos en el crimen.

¡Basta! Grita más fuerte ciudadano.

No solapes, porque hoy fue él, mañana puedes ser tu, ¡tu hijo!
¡Nadie exento!
Todos vulnerables a drogas, a abusos e impunidad.

Hoy padecen ellos, sus padres, que saben cómo y pueden exigir ¡Justicia!
Que llegan hasta él, porque son figura pública, que se ven.

Mañana podrías llorar tú en el silencio y en la ¡Impunidad! De enfrentar solo la exigencia de la ¡Justicia!

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