LLEGAMOS A MARTE

Por: ROBERTO CONTRERAS

El Perseverance finalmente llegó a Marte, una historia que pudimos ver a través de las redes. Fuimos testigos de cómo transcurrieron esos siete minutos de terror que trató la maniobra que representó bajar de 20,000 a 0 kms para poder aterrizar. Tensión en el cuarto de control. Ingenieros con cubrebocas pero era evidente el nerviosismo.

Nos decían que llegaba a tenerse 13 minutos de retraso en el audio respecto a lo que ocurría, en animación, una simulación de lo que debería estar ocurriendo allá en Marte. La tecnología nos permitió ver gran cantidad de detalles de lo que ocurría tanto al interior de la NASA y después la primera imagen de lo que es la superficie del planeta, como en el cine, aplausos y felicitaciones entre el equipo técnico.

Siete meses y 470 millones de kilómetros después desde que salió desde Florida, el Perseverance, un robot geólogo de seis ruedas, tendrá como misión esencial, en una complicada y montañosa zona donde se encuentra el Cráter Jezero, buscar cualquier signo de vida microbiana, incluso antigua y recolectar muestras que se pretenden sean traídas a la Tierra. Esta nave, es un laboratorio en el que la inteligencia artificial puede desarrollar algunos experimentos antes no imaginados, por ejemplo el tratar de convertir el dióxido de carbono marciano en oxígeno. La atmósfera marciana tiene un 96% de diósido de carbono. Un helicóptero, Ingenuity, será probado como parte de los experimentos que habrán de realizarse para que pueda volar y regresar a su punto de origen.

El Perseverance, no estará solo. Naves de Arabia Saudita y China vuelan en torno a la atmósfera del planeta rojo haciendo un trabajo de reconocimiento previo. La nave árabe, llamada Hope, tiene como misión estudiar la atmósfera, la misión china estará tocando la superficie del planeta, a fin de estudiarla como su misión, en el mes de mayo.

Ya en 2012, el explorador Curiosity probó que Marte era habitable, y aún nos envía informes de lo que va encontrando, ahora, la misión del Perseverance es encontrar huellas de vida.

La industria espacial está en una nueva etapa, no una competencia o guerra que buscaba la hegemonía mundial entre Estados Unidos y la Unión Soviética como se planteaba en un principio, sino que se trata de ser colaborativos, trabajar en pro de poder tener a Marte como algo cotidiano para los seres humanos.

No solo son países los que participan en la carrera de la conquista de Marte, grandes empresarios multimillonarios trabajan en la carrera espacial con proyectos propios de naves y cohetes. Los más conocidos: Elon Musk, con su compañía Space X; Jeff Bezos (fundador y director de Amazon), con su empresa Blue Origin; y Richard Branson, con Virgin Galactic.

El proyecto Starship de la empresa Space X de Elon Musk trabaja en poder establecer una colonia en Marte. En esta década, si todo va bien, el hombre habrá de poner su pie en ese planeta. Mientras tanto, Space Xa ya ha dado servicio de carga y envíos a los astronautas de la Estación Espacial Internacional.

En 2026 la Nasa enviará otro Rover con mayor tecnología de movimiento y traerá las muestras que haya recogido el actual Perseverance hacia la tierra.

En Japón, la empresa Noiz, trabaja en el concepto de construir un complejo que dará servicio a las naves que comiencen a realizar viajes al espacio exterior que contaría con hoteles, museos, salones de conferencias y centros de exposición, en fin, la puerta que conecte al planeta con los servicios que se requieran para enlazar al planeta con el espacio.

En 2022 lo hará la iniciativa ruso-europea ExoMars, y Japón y la India preparan sus misiones para 2022 y 2024 respectivamente. La Luna no está olvidada: el programa Artemisa de la NASA pretende poner personas en el satélite en 2024; entre ellas a la primera mujer. La Luna sería en su momento una base intermedia.

La NASA piensa que con los nuevos telescopios espaciales podríamos identificar formas de vida en algunos de los millones de exoplanetas que se estima que hay solo en nuestra galaxia. Y es posible que descubramos indicios presentes o pasados de seres vivos –aunque sean microorganismos– en el planeta rojo o en lunas como Titán o Europa.

En el norte de Chile se construye un observatorio que se espera entre en operación en un par de años capaz de rastrear otros planetas como el número nueve del que en un futuro no lejano nos estarán dando información sobre este posible nuevo planeta que se está rastreando en la galaxia.

El 18 de febrero de 2021, Marte, podemos decir, entra en la agenda de la humanidad.

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