Conocerse a uno mismo no es una meta, es un viaje.

Uno que no se hace hacia afuera, sino hacia adentro.
Y a veces duele… porque conocerse implica dejar de fingir. Implica mirar de frente lo que somos, con lo que amamos y con lo que nos duele, con lo que mostramos y lo que escondemos.

Nos pasamos media vida corriendo detrás de respuestas, validaciones o promesas, cuando en realidad todo empieza en el mismo lugar: dentro de nosotros.
No hay coach, terapia, pareja ni éxito que sustituya el silencio necesario para escucharse.
Porque solo en el silencio profundo es donde uno se encuentra de verdad.

Conocerse no es analizarse, es reconocerse.
Es recordar quién eras antes de que te dijeran quién debías ser.
Es reconciliarte con tus contradicciones, con tus luces y con tus sombras, sin miedo a la imperfección.
Es entender que no estás roto: estás en construcción.
Y que cada herida, si la miras con amor, se convierte en un mapa que te guía de regreso a ti.

Cuando te conoces, todo cambia.
Ya no necesitas demostrar, competir o buscar fuera lo que ya habita dentro.
Empiezas a elegir distinto, a respirar distinto, a amar distinto.
Y la vida, que siempre ha tenido paciencia, se acomoda a tu nueva frecuencia.

Porque conocerse no es cambiar: es volver a ser.
Y en ese regreso a ti mismo, descubres que la paz no se encuentra, se recuerda.

@latitudmegalopolis

LOS MÁS GRANDES DE TODOS LOS TIEMPOS #raulsarmiento #hugosanchez #rafaelmarquez #cuathemocblanco #chicharitohernandez #andresguardado #hectorherrera #memoochoa #atleticodemadrid #horaciocasarin #lapelotaestaenelfondo #futbolmexico

♬ sonido original – Latitud Megalópolis

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *